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La lavanda (Lavandula angustifolia) es una planta aromática, también conocida como espliego, cuyas propiedades la convierten en una excelente aliada para el cuidado personal, tanto por dentro como por fuera. Conocida y apreciada como remedio natural desde la antigüedad, los romanos ya la utilizaban por sus efectos beneficiosos contra el dolor, las náuseas y el hipo. A la lavanda, entre otras propiedades terapéuticas, se le atribuye un efecto calmante, antiséptico, diurético, cicatrizante, antivírico y regenerador de la piel. [/multipage]
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1. Relajante
El aceite esencial de lavanda tiene propiedades calmantes. Con un difusor se puede esparcir la fragancia por una estancia. Ayuda a calmar los nervios y actúa como un antidepresivo. Para un baño relajante añadir 15 gotas de aceite esencial y un vaso de sal. Mezclado con gel de aloe vera es ideal para los masajes antiestrés. [/multipage]
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2. Facilita el sueño
Si tienes problemas para conciliar el sueño, recurre a la lavanda, ya que entre sus beneficios también se incluye el ayudar a relajarnos y a disfrutar de un buen descanso. Humedece un pañuelo con unas gotas de aceite esencial de lavanda y colócalo debajo o cerca de la almohada para favorecer el sueño y el relax. [/multipage]
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3. Combate el acné
La lavanda también puede ser un remedio eficaz para luchar contra el acné, producido por diferentes causas, ya que esta planta es una gran aliada para la salud de la piel. En este caso, para combatir el antiestético acné, los aceites esenciales de lavanda inhiben las bacterias que causan la infección y ayudan a equilibrar la secreción de sebo. [/multipage]
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4. Elimina la caspa
El aceite esencial de lavanda también puede incluir en su lista de beneficios el ser bueno para la salud del cabello y, en concreto, para eliminar la antiestética caspa. ¿Cómo hacerlo? Un sencillo remedio natural es masajear el cuero cabelludo suavemente (haciendo movimientos circulares con los dedos) con aceite esencial de lavanda. [/multipage]
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5. Vahos de lavanda contra resfriados y sinusitis
Los vahos son un buen remedio para descongestionar las vías respiratorias en casos de resfriados o sinusitis, trastornos propios de los meses de frío. En este caso, utilizando lavanda, vertimos 5 gotas de aceite esencial en un litro de agua hirviendo y una cucharadita de bicarbonato de sodio. [/multipage]
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6. Aliviar las picaduras de insectos
El aceite esencial de lavanda es efectivo para aliviar el molesto picor que provocan las picaduras de insectos. Se puede aplicar directamente sobre la zona afectada, ya que no tiene contraindicaciones para la piel, salvo lógicamente en los casos de alergia a esta planta. [/multipage]
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7. Combatir el dolor
Las compresas o paños humedecidos en lavanda son un buen remedio para calmar diferentes tipos de dolores. Aplicando compresas frías humedecidas en infusión de lavanda ayuda a rebajar los moratones. Por su parte, las compresas calientes se recomiendan para el dolor de cuello y espasmos musculares. [/multipage]