Soluciones inteligentes para cinturas anchas

¿Cuánto mide tu cintura? Puede parecer una pregunta banal, pero en absoluto, porque el contorno de cintura puede determinar también nuestro estado de salud. La cintura es, además, una de las zonas corporales en las que tiende a acumularse la grasa y, por tanto, los kilos de más. Un aumento de peso que, en la mayoría de los casos, está motivado por un estilo de vida poco saludable o una dieta desequilibrada. No debemos olvidar que somos lo que comemos, y de ahí la importancia de cuidar la alimentación y adoptar hábitos de vida saludables.

¿A qué nos expone tener la cintura ancha? Si nuestro índice de masa corporal (IMC) están dentro de los rangos establecidos no hay ningún problema (índice que tiene en cuenta el peso en relación a la altura). Sin embargo, la superación de estos valores sí puede poner en riesgo nuestra salud y, por ejemplo, aumentar la predisposición a padecer algún tipo de enfermedad cardiovascular. Es ecir, hay una correlación directa entre el contorno de la cintura y el riesgo de desarrollar una enfermedad (por encima de los 102 centímetros en hombres y los 88 en mujeres se considera obesidad abdominal).

Además de revisar la dieta, el avance de la investigación trae soluciones revolucionarias. La última llega desde EEUU y responde al nombre comercial de Kybella, un fármaco innovador que ha sido recientemente aprobado por la FDA ( la agencia de alimentos y fármacos de Estados Unidos). Un tratamiento que, a través de inyecciones, ayuda a disolver el exceso de grasa y que llega dispuesto a ser una alternativa a otras terapias como la liposucción.

El Kybella es un ácido desoxicólico diseñado por el laboratorio Kythera Biopharmaceuticals, ubicado en California. Un ácido similar al que produce nuestro cuerpo para absorber el exceso de grasa. Este medicamento se infiltra en el tejido adiposo con la ayuda de agujas finas y reduce los depósitos localizados de grasa, ayudando además a la regeneración del tejido (similar al efecto lifting de la piel).

Cabe recordar que, aunque cada vez tengamos a nuestro alcance soluciones más innovadoras, la premisa principal para cuidar la salud y evitar la grasa abdominal está en los hábitos saludables, como el comer bien y practicar de manera regular ejercicio físico. Antes de decantarnos por uno u otro tratamiento, hay que consultar con el médico para conocer la verdadera causa de la acumulación de la grasa en la cintura y, a partir de ahí, adoptar la solución más adecuada a nuestras necesidades.

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