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El cuero cabelludo sensible es un trastorno difícil de ignorar por los molestos síntomas que suele producir. Así, se caracteriza por picor, irritación, sequedad del cabello, enrojecimiento, inflamación y, en muchos casos, aparición de caspa. La causa es la pérdida de la capa lipídica protectora que la piel que se torna más sensible y, por lo tanto, queda más expuesta a las agresiones externas. ¿Qué provoca esta sensibilidad? Desde el uso de un champú demasiado agresivo al estrés o los cambios hormonales pueden influir. Vamos a ver algunos de los remedios naturales que nos pueden ser útiles para aliviar estos molestos síntomas. [/multipage]
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1. Lavar y secar cuidadosamente
Para evitar que el cuero cabelludo se vuelva sensible, provocando la sequedad del pelo y la aparición de la antiestética caspa, hay que extremar los cuidados, empezando por la elección del champú, evitando aquellos productos que contengan demasiados agentes tensioactivos, cuya presencia es reconocible cuando el champú produce demasiada espuma. Durante el lavado, hay que masajear cuidadosamente el cuero cabelludo, estimulando la circulación de la sangre. A la hora de peinar el pelo, hacerlo despacio y de manera suave, sin tocar la piel. [/multipage]
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2. Aplicar nutrientes
La sensibilidad del cuero cabelludo también se caracteriza por la piel seca y deshidratada. Para contrarrestarlo, es necesario alimentar el cabello, optando por productos naturales con alto poder nutritivo. Así, por ejemplo, el aceite de argán o el aceite de jojoba son dos aliados excepcionales para aportar al pelo todos los nutrientes que necesita para mantenerse sano y fuerte. Aplicar un poco de aceite con agua sobre la piel y el cabello, masajeando con los dedos de los manos, en forma de pequeños círculos. Dejar actuar durante unos minutos y lavar el cabello con un champú suave para eliminar todo rastro de aceite. [/multipage]
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3. Vinagre, un buen aliado
En algunos casos, la sequedad del pelo y la sensibilidad del cuero cabelludo también pueden estar provocadas por la calidad del aguaque utilizamos para la higiene personal. Así, por ejemplo, cuando el agua es demasiado rica en cal, puede dañar la capa de sebo cuya función es la de reforzar la protección de la piel. Para contrarrestar los efectos nocivos de la cal presente en el agua, aprovecha el poder del vinagre, añadiendo unas gotas de vinagre de manzana en medio litro de agua y enjuagando el pelo tras retirar el champú. Dejar actuar unos minutos y, para retirar el olor del vinagre, volver a enjuagar el pelo con agua fría. [/multipage]
