Aunque comer con moderación es una premisa básica para cuidar la salud, hay casos en los que ésta no es suficiente. Vamos a ver cuáles son esos 10 alimentos que, por sus ingredientes, sería mejor no comer nunca. Tomamos nota.
Hay alimentos que, directamente, conviene evitar en la dieta, ya que su consumo puede tener justo el efecto contrario al deseado, es decir, que resulten perjudiciales para la salud. Somos lo que comemos, por eso es tan importante prestar atención a la composición de los alimentos para evitar, en la medida de lo posible, que desequilibren nuestra dieta. Y es que no todos los ingredientes de algunos alimentos se pueden considerar muy saludables.
- Margarina: Algunos consideran que es más sana que la mantequilla, pero lo cierto es que puede contener elevados niveles de grasas trans, perjudicales para las arterias y un factor de riesgo del colesterol. Si la tomamos, siempre con moderación.
- Carnes procesadas: Hamburguesas, perritos calientes… La recomendación dietética es no sobrepasar los 20 gramos de carnes procesadas al día, especialmente porque muchas de estas variedades contienen nitritos, colorantes, potenciadores de sabor… y mucho sodio. Es mejor optar por preparar directamente nuestro propio sandwich o bocadillo de carne con un poco de pollo o pavo cortado en finas rodajas.
- Salsa de queso: Algunos de estos alimentos no pueden ser etiquetados ni siquiera como queso. Siempre es mejor hacer nuestra propia salsa añadiendo un poco de queso de untar.
- Soda azucarada: ¿Por qué tomar calorías vacías? Es decir, calorías sin contenido nutricional y que no aportan nada. Este tipo de bebidas suele contener una gran cantidad de jarabe de maíz alto en fructosa. Es mejor beber agua (puedes añadir unas gotas de zumo de limón) o preparar un zumo natural con fruta de temporada.
- Ensaladas de comida rápida: Algunas ensaladas envasadas, especialmente para una comida rápida, tienen más calorías de las que imaginamos. Si además, acompañamos la ensalada con una hamburguesa y patatas fritas, con sus respectivos aderezos, la cantidad de grasa que sumamos a la dieta puede ser importante. La mejor opción es preparar nuestro propia ensalada, con hortalizas de temporada, y un aderezo ligero.
- Patatas fritas: Y hablando de comida rápida, cuidado con algunas patatas fritas porque pueden contener más de 15 ingredientes. Mira la etiqueta y comprueba que llevan las patatas fritas congeladas.
- Edulcorantes artificiales: Más dulces incluso que el azúcar, puede hacer que aumente la apetencia por los sabores dulces. Si tenemos antojo de algo dulce, lo mejor es optar por una pieza de fruta de temporada. Y para la infusión o el café, mejor una cucharadita de miel.
- Palomitas de maíz: Hasta el sabor a mantequilla es una imitación poco saludable. Es mucho más saludable, y barato, preparar sus propias palomitas y añadirle luego, si quiere, una cucharadita de mantequilla para tener un sabor más real.
- Yogur sin grasa: Si eliminamos toda la grasa, ¿con qué se sustituye? Algunas variedades pueden tener más azúcar. Lo mejor es tomar un yogur natural y añadirle trozos de frutas o un chorrito de miel para conseguir una merienda saludable.
- Pan multigrano: Suena saludable, pero no siempre lo es, ya que en algunos casos se trata de pan blanco con harina enriquecida. Si queremos pan de trigo integral hay que buscar el trigo entero en la lista de sus ingredientes.
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