Embarazo: ¿Por qué es importante vigilar la tensión arterial? Tener la tensión alta es un factor de riesgo no solo de nuestro corazón, sino como mantienen los especialistas, también puede hacer a la mujer embarazada más vulnerable a padecer otros problemas de salud como patología renal o diabetes . ¿Cómo mantenerla controlada? Seguir unos hábitos saludables (con la alimentación jugando un papel protagonista), acompañados de los controles médicos, son las dos claves para evitar que la tensión nos juegue una mala pasada durante el periodo de gestación.
Controlar los niveles de tensión arterial nos protege de complicaciones, ya que la hipertensión es un factor de riesgo de los problemas cardiovasculares. Tensión arterial a la que debemos prestar especial atención durante el embarazo, ya que los niveles altos pueden hacer a la mujer más vulnerable a padecer otros problemas como diabetes o patología renal. Diagnosticarla a tiempo, analizar otros factores de riesgo y vigilar los hábitos (alimentación, ejercicio físico, evitar el tabaco o el alcohol) son claves para mantener controlada la presión arterial durante el embarazo. Se estima que una de cada diez embarazadas tiene hipertensión, uno de los trastornos más comunes asociados al embarazo, sobre todo en los casos de madres primerizas, embarazos múltiples. La edad también influye, ya que las mujeres mayores de 35 tienen más riesgos de padecerla.
Seguir unos hábitos saludables durante el embarazo es clave en general para que éste transcurra sin problemas. Hábitos que empiezan por cuidar la alimentación. En una dieta cardiosaludable no puede faltar la fruta (al menos tres piezas al día) y los vegetales (aportan fibra y vitaminas, por lo que deben estar presentes en la comida y en la cena).
Durante el periodo de gestación se debe evitar el consumo de tabaco, tanto porque eleva la presión arterial como la frecuencia cardiaca. El tabaco es perjudicial tanto para la salud de la madre como para el desarrollo del feto. De igual manera, y por los mismos motivos, durante el embarazo se debe evitar consumir bebidas alcohólicas. También conviene evitar las bebidas con cafeína o carbonatadas, así como los alimentos ricos en grasas saturadas. Siempre es más saludable sustituirlos por alimentos ricos en grasas insaturadas, como el aceite de oliva, pescados, frutos secos o semillas.
El sedentarismo o la falta de actividad física es un mal hábito en cualquier etapa de la vida. Durante el embarazo, y realizando una actividad adaptada a nuestro estado, protege el corazón, ayuda a evitar el aumento de peso y reduce los niveles de presión arterial. Y hablando de peso, durante el embarazo se pueden ganar más kilos de los recomendados en cada trimestre. Peso que debemos tratar de controlar, ya que el sobrepeso es un factor de riesgo de hipertensión.
Hipertensión embarazo: Tipos
Hay que recordar que, aunque antes del embarazo no tuviéramos problemas de hipertensión, éstos pueden aparecer durante la gestación (hipertensión gestacional). La prevención es, por tanto, esencial, y empieza por cuidarse y seguir al pie de la letra los consejos médicos. La hipertensión puede ser previa y mantenerse durante el embarazo y, además, hay un tercer tipo de hipertensión que va acompañada de pérdida de proteínas en la orina o hinchazón (Preeclampsia o eclampsia).
