Aunque no lo parezca, estos alimentos también juegan un papel importante y pueden ser fuente de muchos beneficios si los incluimos en nuestra dieta. Alimentos que, a lo largo del tiempo, han sido considerados menos buenos de lo que realmente lo son. Vamos a ver, más detenidamente, de qué alimentos estamos hablando:
- Café: Al consumo de café y, en concreto, a la cafeína siempre se le ha achacado ser la responsable de trastornos de la salud como insomnio, ansiedad y dolor de cabeza. Sin embargo, tomado con moderación (1-2 tazas al día), el café puede ser un aliado de primera para la salud y, en especial, para la salud de la mujer. ¿Sabías que el café puede ayudar a reducir los riesgos de depresión? Y no solo eso. Además de aportarnos la energía que necesitamos a primera hora de la mañana para ponernos en marcha, tomar una taza de café (mejor si la mezclas con leche), está constatado que ayuda a mejorar el estado de ánimo, la memoria, la función cognitiva y el tiempo de reacción. Razones de peso para beber café, a las que se puede sumar es muy eficaz para controlar la diabetes, al reducir el nivel de azúcar en la sangre después de una comida.
- Bacon: Excluido en muchas ocasiones de la dieta por su alto contenido en grasa y sal, especialmente en los casos de hipertensión. Sin embargo, investigaciones científicas han constatado que no todas las grasas son malas y que la grasa de alimentos como el bacon no siempre está asociada a niveles altos de colesterol (factor de riesgo de enfermedades del corazón). Tomada con moderación (sin abusar y repetir todos los días) no supone ningún problema.
- Queso: Además de grasa y calorías, algo que se repite constantemente cuando se quiere desprestigiar un alimento, el queso también es una fuente excepcional de proteínas y de calcio, fundamental para los huesos. Los productos lácteos son básicos en la dieta y, por tanto, deben ser tomados a diario. Seguir una dieta equilibrada es la mejor manera de evitar la grasa abdominal y de reducir el riesgo de padecer enfermedades del sistema cardiovascular.
- Carne roja: Estamos ante un alimento del que se ha dicho casi de todo. Sin embargo, no debemos olvidar que la carne roja (ternera, por ejemplo), también contiene hierro, vitamina D y zinc, por lo que es aconsejable incluirla en la dieta semanal. Para prepararla, mejor a la plancha, y acompañada de una ensalada verde.
- Caracoles: En algunos países son considerados un auténtico manjar. En nuestro país, forman parte de la alta cocina y no a todo el mundo le gustan. Sin embargo, los caracoles no tienen grasa ni azúcar, y por el contrario son ricos en fósforo, potasio, proteínas y magnesio. Además contienen abundante triptófano, una sustancia que ayuda al cerebro a producir serotonina, un neurotransmisor esencial para regular el sueño, el apetito y el estado de ánimo.
- Hígado de ternera: El hígado no es en absoluto dañino, sino todo lo contrario. Es nutritivo y rico en vitaminas (A, B6 y B12 especialmente), proteínas y minerales (fósforo, zinc, hierro), siendo por lo tanto esencial para la salud ósea y el fortalecimiento del sistema inmunológico.
- Anguilas: ¿Sabías que es una excelente fuente de ácidos grasos Omega 3? Y por si fuera poco, son bajos en sodio y ricos en otros minerales esenciales como el hierro, calcio, potasio, hierro y magnesio.
- Mijo: Un cereal integral, remineralizante y alcalinizante. Aunque algunos puedan considerar que es un cereal menor, lo cierto es que conviene echar un nuevo vistazo a sus propiedades para darnos cuenta de que es más saludable de lo que pensamos. Es fácil de digerir, no contiene gluten y es rico en vitaminas (sobre todo del complejo B), fibra y antioxidantes. Estudios recientes sugieren que este cereal ayuda a reducir el riesgo del desarrollo de cáncer de colon, el colesterol y los triglicéridos, así como de la diabetes.
- Ostras: Lo primero que destaca de este alimento es su aporte en zinc, una propiedad que convierte a este alimento es un aliado de la fertilidad, especialmente en el caso de los hombres ya que la deficiencia de zinc puede ser una causa de impotencia. Las ostras proporcionan además ácidos grasos Omega 3, vitamina E, magnesio y aminoácidos.
- Salsa de tomate: Sí es cierto que conviene moderar el consumo de las salsas de tomate que contienen demasiada fructosa. Sin embargo, podemos encontrar, o preparar directamente en casa, una salsa sin azúcar. El tomate es un buen aliado de la salud, un ingrediente que nos proporciona licopeno y vitamina E, ayudando a la prevención de tumores.
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