Dieta del agua: Las mejores bebidas para hidratarte. El agua es la bebida más apta para satisfacer la sed. Como no contiene calorías podemos beberla en cantidad, sin miedo a engordar. El agua es indispensable para la salud del organismo. El consumo de agua, es decir una correcta hidratación, nos asegura también un aspecto más saludable. Para satisfacer la exigencia de líquidos del organismo, podemos utilizar cualquier tipo de bebidas, siempre y cuando sigamos una serie de recomendaciones.
Cada día, nuestro cuerpo elimina una parte de agua por la respiración, el sudor y la orina, siendo necesario reponer a diario las pérdidas para mantener el equilibrio hídrico, especialmente en los meses estivales –época en la que aumenta la transpiración– o al realizar ejercicio físico. Además del agua propiamente dicha, hay alimentos valorados por contenerla en elevadas proporciones –frutas, hortalizas y verduras- y diferentes bebidas apetecibles a las que recurrir. Cabe recordar que las que no están recomendadas son las bebidas alcohólicas, porque el alcohol es un vasodilatador y aumenta la sensación de calor. Además der ser calórico -7 calorías por gramo-, el alcohol no hidrata, sino todo lo contrario, favorece la deshidratación.
Es aconsejable beber, al menos, un litro y medio de agua al día. Entre las mejores bebidas alternativas para hidratarnos están los zumos de fruta. Además de contener agua, tienen una discreta cantidad de potasio, mineral que se pierde con la transpiración, y si son consumidos recién preparados con frutas frescas, también aportan una buena cantidad de vitaminas.
Otra bebida saludable interesante son las infusiones. Se preparan con agua hirviendo e hierbas puestas en infusión. Si no les añadimos azúcar, no aportan calorías. Dosis de azúcar para la que contamos con alternativas más naturales (miel, própolis). Tomadas frías pueden ser una bebida óptima para los días más calurosos.
Los refrescos, por su parte, contienen aditivos y tienen un aporte calórico más o menos elevado, en función de la cantidad de azúcar que contengan. Las bebidas de fruta (tipo naranjada) contienen una proporción muy baja (en torno al 10%) de zumo de naranja, pero elevada de azúcares añadidos. Conviene tomarlos solo ocasionalmente, porque aunque nos refresca al beberla, no nos quita la sed. Las bebidas sin alcohol y sin azúcar añadido, aunque comparten características con los refrescos, tienen menos calorías porque son endulzadas con edulcorantes y su valor energético es muy bajo.
Consejos para beber más
El agua, entre otros beneficios, contribuye a disminuir las retenciones e hinchazones, garantizando el justo drenaje de los líquidos y desintoxicando a fondo el organismo. Los efectos de una correcta hidratación son una piel más sana y luminosa, una mejora de la celulitis, al favorecer la eliminación de líquidos y de toxinas.
Beber un litro y medio de agua –sumado a los líquidos que nos aportan los alimentos- no es complicado, aunque pensemos lo contrario.
- Es aconsejable fraccionar el consumo de líquidos durante el día. Podemos empezar tomando por la mañana un vaso de agua, té, infusión o leche; y, después, entre las comidas, podemos tomar un zumo de frutas o un té frío.
- Durante las comidas, es aconsejable beber al menos un par de vasos de agua; y, por la noche, antes de ir a dormir, un último vaso de agua.
- El agua, si nos resulta insípida, podemos enriquecerla con un poco de zumo de limón, optar por una infusión o un té frío, mejor sin azúcar.
