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¿Por qué hay que reducir la presencia de sal en la dieta? En primer lugar, por una cuestión de salud, y en segundo lugar porque la sal engorda. Cuestión de salud porque el exceso de sal favorece la retención de líquidos, la sensación de hinchazón y es un aderezo poco recomendable para cuidar la salud del corazón. Si se trata de dar sabor a los platos, contamos con otras alternativas más saludables. Es una de las formas más sencillas de sustituir la sal en la dieta, pero no la única. Toma nota de estos cinco consejos. [/multipage]
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Las especias no solo realzan en sabor de las recetas, sino que algunas de ellas son además un excelente aliado para cuidar la figura. Además evitarás la temida retención de líquidos y mejorará la digestión. Entre las especias, jengibre, romero, pimienta, cilantro, limón, ajo… [/multipage]
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2. Apuesta por la fibra de la fruta
La fibra es fundamental para la salud, y entre los alimentos que no pueden faltar en la dieta está la fruta, la cual además nos ayudará a conseguir el aporte necesario reduciendo la presencia de otros alimentos que, además de fibra, también contienen más sal, como es el caso del pan. [/multipage]
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3. Cocina y adereza con aceite de oliva
El aceite de oliva virgen es el mejor aliado para cocinar y para aderezar los platos sin necesidad de añadir sal, puesto que tiene un intenso sabor. La sal, además de un condimento, ayuda a conservar los alimentos, pero en realidad hoy en día podemos conseguir productos frescos a diario. [/multipage]
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4. Preparación de los alimentos
Para reducir la cantidad de sal en la comida también hay que elegir el modo de preparación. Asar o saltear los alimentos es la forma de cocción que más potencia el sabor de los alimentos y de las especias añadidas, sin necesidad de recurrir a la sal. Adereza con aceite y vinagre aromatizado. [/multipage]
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5. Elige productos frescos
Los productos frescos y de temporada conservan mejor los nutrientes y los sabores, lo que hace que no necesitemos añadir sal en su cocción. Los alimentos como frutas y hortalizas siempre que se pueda es mejor comerlos crudos, nutritivos, saciantes y sin sal añadida. [/multipage]
