Tomar las uvas: Una tradición cardiosaludable. Para empezar el año con buen pie y apostando por la salud, nada como comer las 12 uvas. Es el consejo de los expertos de la Fundación Española del Corazón y de la Sociedad Española de Cardiología, los cuales recuerdan los múltiples beneficios y propiedades cardiosaludables que se esconden detrás de esta pequeña fruta, la uva, protagonista indiscutible de la última noche del año. Comer uvas es, por tanto, y con el aval de los especialistas, el primer gesto saludable que podemos hacer por nuestra salud con la llegada del año nuevo.
Uvas que no debemos renunciar a acompañar con una copita de champán, bebida que tomada con moderación también reporta interesantes beneficios. Pero, sin duda alguna, las protagonistas son las uvas. Y es que la tradición de tomar las 12 uvas para dar la bienvenida al año es, según han resaltado los médicos y especialistas, una apuesta por la salud, ya que estamos tomando una fruta rica, entre otros, en resveratrol, incluido dentro de la familia de los polifenoles cuya propiedad estriba en aumentar los niveles de óxido nítrico. Al tiempo, el resveratrol ayuda a mejorar el flujo sanguíneo, a reducir la formación de plaquetas y a equilibrar los niveles de colesterol (aporta mayor protección contra el denominado colesterol malo).
Pero hay más motivos saludables para no renunciar a la tradición de comer las uvas. Así, desde la Fundación Española del Corazón y la Sociedad Española de Cardiología también subrayan el efecto cardioprotector de tomar una copa de champán. Su contenido en polifenoles ayudan evitar la formación de los radicales libres, los responsables de acelerar el envejecimiento. No es la primera vez que los especialistas centran su atención en esta bebida. De hecho, un estudio realizado por la Facultad de Química, Farmacia y Alimentación de la Universidad de Reading, en Reino Unido, constató que beber dos copas de champán al día ejerce un papel protector de las paredes de los vasos sanguíneos, lo que ayudaría disminuir los riesgos de padecer algún episodio cardiaco o trastorno cardiovascular.
Pero tomar las uvas no es el único gesto ni propósito saludable para empezar con buen pie el año. Los especialistas de la Fundación Española del Corazón recuerdan que, a través de la dieta, podemos hacer mucho por cuidar nuestro corazón. Una dieta sana, variada y equilibrada, con la dieta mediterránea como perfil dietético más equilibrado. Una recomendación en la que inciden los médicos teniendo en cuenta que calculan que durante estas fiestas aumentamos la ingesta de calorías en un 50 por ciento, lo que de entrada se traduce en un aumento de peso, una media de tres kilos al final de las fiestas navideñas.
Reducir la ingesta de grasas saturadas y apostar por productos más saludables, como frutas, verduras, pescado azul, frutos secos, legumbres y desnatados es la mejor manera de evitar el descontrol de la alimentación durante las fiestas navideñas, y sin necesidad de renunciar a disfrutar de los platos navideños.
Cuidar nuestra salud y apostar por unos hábitos saludables es el mejor propósito que nos podemos marcar para el nuevo año. Hábitos saludables que incluyen una buena alimentación, la práctica de ejercicio físico de forma regular y abandonar, en el caso de los fumadores, el hábito del tabaco.