La tiroides es una glándula situada en el cuello que tiene mucho que ver con nuestra salud. Y es que las hormonas que produce influyen en nuestro metabolismo, en el ritmo cardíaco y demás. Si todo va bien no tenemos problemas pero ¿qué pasa si deja de funcionar correctamente? Por eso es bueno conocer los síntomas de su malfuncionamiento.
Unos 300 millones de personas en todo el mundo están afectadas por la enfermedad del tiroides, y somos las mujeres quienes más lo padecemos. Algunas empiezan a sufrirlo durante el embarazo y otras después del nacimiento del bebé. En este caso es importante llevar a cabo un tratamiento cuanto antes, ya que si no, puede ser peligroso tanto para la madre como para el feto.
Por tanto, te pueden ocurrir dos cosas:
- Que sufras hipotiroidismo: tu tiroides produce hormonas en defecto
- Que sufras hipertiroidismo: tu tiroides produce hormonas en exceso.
Llegados a este punto, lo más importante para detectarlo es conocer cuáles son los síntomas del hipertiroidismo, ¿qué nos muestra que algo no funciona? Sobre todo la pérdida de peso, irritabilidad, incremento del latido cardiaco, sensación de sofoco…
Y para aquellas que sufren hipotiroidismo es frecuente un aumento de peso sin explicación, pérdida de cabello, piel seca, dolor muscular…
Por eso es necesario que si reconoces alguno de ellos o varios en ti acudas a un médico para encontrar el tratamiento adecuado a tu problema de tiroides. ¡Igual te sorprendes y estás pasando por una época de estrés que altera tu organismo! Pero ante todo debes asegurarte….