Señales de un aborto espontáneo

Pérdidas de sangre, dolor, escalofríos y, en algunos casos, fiebre, son algunos de los síntomas más comunes que anuncian que la mujer está sufriendo un aborto espontáneo. Las causas que pueden estar detrás son múltiples, desde una anomalía congénita en el feto a un trastorno en el tracto reproductivo de la mujer. Otro factor a tener en cuenta, ya que aumenta la predisposición a padecer un aborto, es la edad de la futura madre. A más edad, más posibilidades, pasando de un 12% en las mujeres de menos de 30 años, a más del 51% en el cas de las mujeres que se quedan embaradas cumplidos los 40.

Síntomas ¿Cómo reconocer, y no confundir, las señales de un aborto espontáneo? Se considera como tal, cuando éste se produce antes de la semana 22 de gestación. A partir de esta semana, se considera parto prematuro. Según datos médicos, más del 80% de los abortos se producen antes de la semana 12 de gestación.

El síntoma más común y reconocible son las pérdidas o sangrado vaginal, de un color marrón oscuro o con coágulos, el cual puede llegar acompañado de dolores en el bajo vientre. Si se producen pérdidas de sangre, especialmente en el primer trimestre (cuando hay un mayor riesgo de aborto), hay que acudir al médico. El sangrado vaginal y el dolor aumentan si el aborto ya se está produciendo. El sangrado vaginal suele ser abundante cuando se produce un aborto natural por embarazo ectópico, cuando el embrión se ha desarrollado fuera del útero.

Además del sangrado, la mujer puede sentir dolor en la zona abdominal y en la zona baja de la espalda, en forma de calambres, si bien no hay que confundirlos con los que se producen durante el embarazo. Si son muy intensos, y van acompañados de pérdidas vaginales, hay que consultar de manera urgente al médico.

Algunas mujeres también padecen otros síntomas como fiebre o sensación de escalofríos, al mismo tiempo que los síntomas normales del embarazo desaparecen (náuseas, sensibilidad en los pechos…), toda vez que el embrión ha cesado su desarrollo. Puede producirse incluso una reducción del tamaño del vientre. La fiebre, por ejemplo, es un síntoma común del aborto séptico, el cual suele llegar acompañado de algún tipo de infección, dolor y sangrando vaginal. Puede poner en serio riesgo la salud de la mujer.

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