Remedios caseros para curar la otitis

La otitis es una dolencia del oído que no solo puede llegar a ser muy molesta, sino que puede llegar a ser crónica si no se trata de manera adecuada. Para complementar el tratamiento recomendado por el otorrino para curar la otitis, aquí tienes una selección de remedios naturales que te ayudarán a aliviar los síntomas.

La otitis es una enfermedad de adultos y de niños, generalmente causada por un exceso de mucosidad (catarros y gripes) en el conducto que comunica la nariz y la faringue (trompa de Eustaquio) y que puede acabar dañando el oído. Si tenemos molestias en los oídos, hay que acudir al médico, especialmente si el oído supura, si hay episodios de fiebre y dolor o si tenemos la sensación de oídos taponados o bajo presión. Los remedios naturales pueden ayudar a aliviar los síntomas y a acelerar la curación de la otitis, siendo un buen complemento de los tratamientos médicos que, en ocasiones, es necesario seguir.

Remedios caseros para aliviar la otitis

Vamos a ver algunos de los remedios naturales y caseros que pueden resultar muy efectivos para aliviar y mitigar los síntomas de la otitis:

Própolis para mitigar las infecciones: Sobre todo en el caso de los niños, los jarabes de própolis, equinácea y tomillo (propiedades antisépticas) evitan las infecciones de oído y aceleran la recuperación en caso de otitis. Si el preparado incluye también regaliz, ayuda a reducir los procesos inflamatorios.
Caléndula contra el dolor de oídos: Uno de los remedios más conocidos para aliviar el dolor de la otitis es mezclar aceite de oliva con pétalos de caléndula, llantén y flores de gordolobo. Deja que la mezcla macere durante unas horas y, luego filtra. Calienta el preparado al baño María y aplica unas gotitas en un algodón. Apóyalo en el oído. Puedes repetir varias veces al día la operación.
Lavanda para la otitis externa: Aunque se trata de una otitis más habitual en verano (por el agua del mar o de la piscina), suele ser muy eficaz para tratar la otitis externa. Vierte dos gotas de aceite esencial de lavanda en un algodón y aplícalo en el oído.
Cebolla y aceite de oliva: Dos ingredientes que, a buen seguro, siempre tienes a mano. Calienta las capas externas de dos cebollas en aceite de oliva virgen. Retira y deja enfriar. A continuación, sumerge un algodón en el preparado. Escúrrelo y colócalo en el oído afectado.

Aplicar calor es uno de los remedios más tradicionales para reducir el dolor de oídos. Para ello, podemos calentar en el microondas un cojín relleno de semillas -puedes encontrarlos en tiendas de productos naturales, herbolarios- y colocarlo sobre el oído afectado. Otra opción es hacer tu propio cojín, con huesos de cereza, ya que concentran el calor mucho tiempo.

Otro remedio casero que puede ser eficaz es planchar una manopla de toalla y rellenarla de sal gorda, para aplicarla en el oído dolorido y reducir las molestias.

Recuerda que es importante cuidar la salud de tus oídos. Por eso, si lo que empiezan siendo unas leves molestias no remiten, acude siempre al médico, ya que es la mejor manera de reducir las posibilidades de que las molestias reaparezcan e, incluso, que el problema se convierta en crónico, con daños severos en el oído.

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