Remedios caseros para refrescar el aliento

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¿Cómo refrescar el aliento? En la mayoría de las ocasiones, el mal aliento está causado por problemas bucales, pero también hay otros motivos, como los problemas digestivos o la garganta irritada. Para olvidarte del mal aliento, puedes echar mano de estos sencillos y efectivos remedios caseros.
 
Una infección de encías, un problema de caries, una mala digestión, un problema de sinusitis… son algunas de las causas de la halitosis o mal aliento. Además de acudir al médico o dentista, también podemos recurrir a las soluciones naturales, con las plantas como protagonistas, y a algunas especias que, utilizadas como ingredientes para aderezar los platos, también resultan muy efectivas.
 

Mal aliento: soluciones caseras

Vamos a ver algunos de los remedios caseros más efectivos para refrescar el aliento y evitar los problemas de halitosis.

  • Semillas de cilantro: Si después de lavarte los dientes, el mal olor persiste, prueba a masticar una o dos semillas de cilantro, con efecto antibacteriano. También se pueden tomar en infusión, combinado con anís verde e hinojo, para favorecer la digestión y evitar las fermentaciones intestinales.
  • Eucalipto: Las hojas de eucalipto son ricas en cinecol, el cual ayuda a eliminar las bacterias bucales que pueden provocar mal aliento. Prepara una infusión con una cucharadita de eucalipto por vaso de agua hirviendo; dejar reposar y enjuagarse la boca. Este remedio herbal también ayuda a limpiar las vías respiratorias.
  • Té de roca: Es una de las soluciones herbales más efectivas. Se prepara mezclando 20 gramos de té de roca, de menta y de anís verde con 10 gramos de perejil. Utiliza una cucharada de esta mezcla por vaso de agua. Ayuda a evitar la acidez de estómago y alivia los problemas digestivos.
  • Alfalfa: La diabetes o el mal funcionamiento del hígado también puede causar mal aliento. En estos casos, la solución viene de la mano de la alfalfa, de acción depurativa, desintoxicante, estabiliza los niveles de azúcar y estimula el trabajo del hígado.

Tal y como hemos señalado, también hay algunos ingredientes a tener en cuenta a la hora de preparar los platos. Hablamos de las especias, que también pueden refrescar el aliento y evitar la halitosis. Así, en platos salados, opta por el perejil, la menta o la hierbabuena, para contrarrestar el sabor y olor del ajo y la cebolla. En los postres, mejor canela, que evita el desarrollo de las bacterias bucales. Si no tienes cepillo de dientes a mano para después de la comida, añade canela en polvo al postre (macedonia, yogur…). Y para las infusiones, zumo de limón, que estimula la producción de saliva, el mejor protector para evitar las caries y las infecciones de encías. La sequedad bucal (en ayunas, al fumar, por el estrés) es un precursor del mal aliento.
 
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