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La reconstrucción mamaria después de que la mujer se someta a una mastectomía puede realizarse con cirugía o con tatuaje, una alternativa a la micropigmentación oncológica para recuperar el pezón y la areola (zona oscura alrededor del pezón).
Los tatuajes para mujeres con mastectomía se realizan unos meses después de la cirugía, y tal y como han constatado los especialistas en oncología, son mucho más que una medida estética, ya que no podemos olvidar que la mastectomía provoca efectos físicos y psicológicos en la mujer. La mastectomía es una cirugía para extirpar un seno en caso de diagnóstico de cáncer de mama, uno de los tumores femeninos más frecuentes.
Tatuajes para mujeres con cáncer de mama
Los tatuajes no solo permiten colorear la areola y el pezón para que su apariencia sea lo más parecida posible al otro seno, sino también disimular las cicatrices de la mastectomía. No es la primera vez que la técnica del tatuaje se convierte en aliada de las mujeres en su lucha contra el cáncer y, en especial, contra las secuelas físicas que puede dejar. Los tatuajes en la cabeza, por ejemplo, son una alternativa para hacer frente a la pérdida de cabello provocada por los tratamientos de quimioterapia.
La reconstrucción de las mamas tras una extirpación parcial o total es un tratamiento que, hasta ahora, se completaba con la micropigmentación oncológica, una técnica que en líneas generales consiste en introducir un pigmento en la primera capa de la piel (más superficial que el tatuaje) para colorear el pezón y la areola.
La alternativa de los tatuajes permite recuperar el cuerpo y supone un importante estímulo para la autoestima de la mujer. Tatuajes que además se pueden personalizar, con diseños tan sorprendentes como los que te invitamos a descubrir en la galería de imágenes. Tatuajes que son sinónimo de esperanza y un mensaje de valentía de las mujeres que luchan y ganan la batalla contra el cáncer de mama.
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