Un chalazión, también denominado lipogranuloma de la glándula de Meibomio, es un pequeño grano o quiste sebáceo que aparece en el párpado del ojo y que puede llegar a resultar molesto, así como antiestético. Aunque de apariencia similar al orzuelo, guarda algunas diferencias, como por ejemplo que el chalazión no suele resultar tan doloroso. Entre los síntomas más comunes del chalazión se incluyen el incremento del lagrimeo, la inflamación del párpado y mayor sensibilidad a la luz.
El chalazión se forma por la obstrucción de grasa de una glándula sebácea del párpado, y que se denominan glándulas de Meibomio, encargadas de producir el líquido que lubrica los ojos. Generalmente, tiende a remitir al cabo de unas semanas, siendo suficiente con aplicar algunos remedios naturales (como aplicar compresas calientes sobre los ojos varias veces al día y durante unos 10 minutos), en algunos casos puede que siga creciendo, haciendo necesario en estos casos recurrir a la cirugía para extirparlo. También será una opción a tener en cuenta cuando el chalazión se vuelve recurrente o cuando afecta a otros tejidos de los párpados. Una sencilla operación (de apenas media hora y que no requiere hospitalización) que no deja cicatriz evidente, ya que se realiza por la zona inferior del párpado del ojo afectado. El chalazión tiende a aparecer en un ojo, aunque pueden resultar afectadas las glándulas de cualquiera de los dos. Cuando nos sometemos a cirugía para eliminar el chalazión, el médico también prescribirá unas gotas con efecto antibiótico o una pomada para los ojos para que cicatrice más rápido (aplicar 4 veces al día).
Prevención
Hay personas que son más propensas a padecer un chalazión o un orzuelo. Como medida preventiva se recomienda realizar lavados de las pestañas, aplicando champú para bebés y enjuagando bien a continuación con agua.
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