Problemas de salud mental podrían ser causados por el trabajo

Entre el 11 y el 17% de los problemas de salud mental en nuestro país son atribuibles a las condiciones de trabajo. A esto hay que sumar que 4 de cada 10 personas reconoce no gestionar de manera adecuada el estrés en el trabajo, lo que se traduce en una pérdida de entre el 50- 60% de las jornadas laborales.

Datos que constatan cómo influye el trabajo en la salud y que, además, corroboran la advertencia lanzada por la Agencia Europea de Seguridad y Salud en el Trabajo (OSHA, sus siglas en inglés), sobre los riesgos psicosociales como causa de la pérdida de más de la mitad de las jornadas de trabajo. El estrés laboral es a día de hoy el segundo de problema de salud más común en los países de la Unión Europeo, por detrás de las dolencias muscoesqueléticas.

¿Cómo afecta el trabajo a la salud mental?

La sobrecarga de trabajo, los horarios laborales rígidos, las relaciones interpersonales (compañeros, jefes…), la inestabilidad en el empleo (precariedad o temporalidad) o el acoso psicológico (minar la autoestima del trabajador, limitar sus funciones o aislarlo) son algunas de las condiciones adversas en el entorno de trabajo que pueden causar problemas físicos y emocionales (pérdida de autoestima, bajo estado de ánimo, estrés laboral, ansiedad, depresión…).

La Ley de Prevención de Riesgos Laborales de nuestro país subraya que las condiciones de trabajo son cualquier característica del mismo que pueda influir de manera significativa en la generación de riesgos para la seguridad y salud del trabajador.

Promoción de salud mental en el trabajo

La prevención de la salud mental en el trabajo es clave, con herramientas como una organización flexible, la conciliación de la vida laboral y familiar, una buena comunicación, motivación o respeto de los límites, tal y como señalan desde la Federación Salud Mental de Castilla y León. Todo ello además en un entorno de trabajo agradable, seguro y limpio en el que poder hablar de salud mental con los jefes sin problemas. Tal y como subrayan los expertos en salud mental, los entornos de trabajo agradables y saludables mejoran la productividad y reducen el absentismo o las bajas laborales.

Pero la prevención de la salud mental no debe ceñirse ni mucho menos al puesto de trabajo, ya que es una responsabilidad de la sociedad apostar por la seguridad y la salud laboral, y de ahí la importancia de concienciar sobre los riesgos de trabajar en un entorno negativo y desmotivador.