Permanente del pelo: Riesgos y consejos

La permanente del pelo es uno de los tratamientos más demandados y más eficaces para conseguir volumen y dar un cambio a nuestra imagen con rizos y tirabuzones. Aunque es cierto que no se trata de un tratamiento definitivo, tampoco podemos olvidar que el uso de determinados productos químicos puede entrañar riesgos para el cabello, por lo que es aconsejable seguir una serie de consejos para evitar daños innecesarios y, sobre todo, que la permanente, lejos de hacernos sentir más guapas, suponga un quebradero de cabeza.
 
¿Buscas un cambio de imagen?, ¿quieres darle más volumen a tu cabello? Entre los tratamientos más eficaces para lograrlo, la permanente del pelo. Pero para que la elección sea acertada no solo en el plano estético sino también en cuanto a la salud del cabello, conviene tener en cuenta una serie de consejos que nos vendrán bien para evitar que nuestro pelo sufra algún riesgo innecesario. Tomamos nota, porque nuestro pelo requiere una serie de cuidados que van más allá del simple lavado y peinado. Así, por ejemplo, la dieta también influye en la salud del pelo, y los productos estéticos que le aplicamos, también.
 

Permanente del pelo: Precauciones

Si te has decidido por una permanente para el pelo para conseguir unos bonitos rizos, conviene seguir una serie de precauciones, tales como:

• La elección de la peluquería: Lo mejor es poner nuestro cabello en manos de los profesionales, con experiencia contrastada y que para el desempeño de su trabajo utilice única y exclusivamente productos seguros y certificados –es decir, la calidad por encima del ahorro o los productos de oferta y que pueden entrañar riesgos para el pelo-.
• Un tratamiento no apto para todo tipo de cabellos. Antes de optar por un cambio de look basado en una permanente conviene solicitar opinión, ya que no todos los cabellos son iguales y, en algunos casos, podemos dañar la salud del pelo. Si nuestro pelo es demasiado fino, también puede ser frágil, por lo que es el tratamiento más adecuado.
• Hidratación y más cuidados. Después de realizar una permanente el pelo necesitará una dosis extra de cuidados. Así, entre otros, hay que prestar especial atención a su hidratación, con la aplicación de mascarillas semanales y productos nutritivos, especialmente a base de aceite o manteca de karité y aceite de semilla de lino.
• El pelo también sufre de estrés. Los tratamientos demasiado agresivos para el pelo pueden provocar daños. Tampoco se deben combinar tratamientos como permanentes y coloración del cabello, ya que pueden ser potencialmente estresantes.

Riesgos para el cabello

Los principales que asume el pelo son los productos químicos. El uso continuado o el abuso de productos químicos no solo resultan agresivos, sino que debilitan el pelo. De hecho, la permanente requiere el uso de productos que en determinadas etapas, como por ejemplo el embarazo, puede resultar más dañino para nuestro cabello. No se trata de prohibir realizarse la permanente durante el embarazo, pero sí optar por un ondulado más ligero que requerirá un tratamiento más corto y suave.