El miedo a perder el control es un trastorno emocional característico de las personas ansiosas o con rasgos obsesivos. Miedo a no tener el control sobre los pensamientos, impulsos o actitudes y que puede desvelar un problema de autoconfianza y seguridad en uno mismo.
El temor a perder el control puede aparecer en una situación puntual, inesperada, pero también puede convertirse en fobia si no aprendemos a gestionar las emociones. El estrés, las situaciones intimidantes o el temor a tener un ataque de pánico pueden actuar como desencadenantes. ¿Cómo superar el miedo a perder el control?
El miedo a perder el control es un miedo irracional que surge cuando se padece ansiedad, pensamiento negativo que provoca temor y que puede volverse recurrente. Esta sensación de miedo genera tensión, lo que a su vez aumenta la ansiedad.
El miedo excesivo o fobia, combinado con una ansiedad elevada, puede interferir seriamente en la vida cotidiana, al mantenerse en estado de alerta para evitar las situaciones que despiertan los pensamientos obsesivos y el miedo a perder el control y hacer daño.
El temor a perder el control es una respuesta o impulso emocional al ponernos siempre en lo peor ante situaciones próximas o imaginadas. Una respuesta motivada por la interpretación errónea de las señales. Aunque la persona sea consciente de que el temor es irracional, solo el dejarse atrapar por el pensamiento o imaginar cómo enfrentarse a la situación puede provocar un ataque de ansiedad o pánico.
Para eliminar el miedo a perder el control el primer paso es reconocer los síntomas físicos de la ansiedad (aceleración del ritmo cardíaco, respiración agitada, aumento de la temperatura corporal, contracción de músculos…) e identificar la situaciones o pensamientos que nos generan miedo a perder el control.
Respirar profundo para escapar mentalmente y ayudar a controlar la ansiedad en cualquier situación. Cierra los ojos e inhala durante 4 segundos; mantén el aire en los pulmones unos segundos y expúlsalo lentamente. Repite el ejercicio hasta que notes como el cuerpo se relaja.
Pequeños trucos para mantener el control de lo que decimos y hacemos. Es preferible recurrir a un mecanismo de escape rápido que dejarse llevar por la tensión y la ansiedad, como respirar profundo o salir un minuto a tomar el aire para evitar reacciones impulsivas.
Mantener la mente ocupada es la mejor manera de evitar las ideas obsesivas y los temores recurrentes. Desde salir a dar un paseo a escuchar tu canción favorita. Y para relajar la mente y el cuerpo, las técnicas de mindfulness.
En primavera la piel necesita un extra de cuidados para que sufra lo menos posible…
Este miércoles, la audiencia al completo de 'La Isla de las Tentaciones' se ha quedado…
Gabriela Guillén ha vuelto a la carga contra la figura del padre de su hijo…
Frank de la Jungla ha compartido un vídeo en el que relata cómo han sido…
Sandra Barneda y Nagore Robles vuelven a verse las caras más de un año después,…
Pese a que en las últimas semanas habían aumentado los rumores de una reconciliación entre…