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Entre la frontera de India y Pakistan, en el valle del río del que toman su nombre, viven los Hunza, considerado el pueblo más longevo del mundo. Su excelente buena salud -con la práctica ausencia de enfermedades- ha despertado la curiosidad de los expertos en las últimas décadas, especialmente su forma de vida y costumbres, las cuales le han valido convertirse en el pueblo al que todos atribuyen contar con el secreto de la eterna juventud.
¿Es posible ganar la batalla al tiempo? Entre los habitantes de este pueblo, los hay que han llegado a cumplir los 120 años, y la edad fértil de la mujer se amplía incluso más allá de los 60 años. Su apariencia física (de ojos claros) no delataría su edad ni al más avezado, ya que los años no parecen pasar por los habitantes del que ya muchos denominan como el oasis de la juventud. ¿Cuál es el secreto de su longevidad? Su estilo de vida. Ahí reside la respuesta, con hábitos como el bañarse con agua fría (incluso estando bajo cero) o llevar una dieta lo más saludable y natural posible, muy similar a la dieta vegetariana.
Precisamente, vamos a detenernos en alimentación de los Hunza, en la cual reside la clave a su buena salud y a la prevención de las enfermedades. Algunos expertos han apuntado también a la posible influencia del clima, incluso el entorno natural, si bien los pueblos vecinos, con las mismas condiciones climáticas, no gozan de una esperanza de vida tan larga.
Otros autores también apuntan, como clave de la salud de los Hunza, el agua que toman, y que procede de las montañas, con un elevado contenido en minerales.
La dieta de los Hunza Robert McCarrison, médico de Escocia, es además un experto estudioso de la dieta de los Hunza. Así, constató que hay determinados alimentos básicos en su alimentación: Frutas y verduras crudas en verano; albaricoques secos, queso de oveja y granos germinados en invierno.
La dieta de los hunza es de unas 2.000 calorías al día (50 gramos de proteínas, 36 gramos de grasa y 365 gramos de carbohidratos); muy baja en sal y con una cantidad reducida de proteínas (las proteínas animales, por ejemplo, están exentas de la dieta). Además, practican el ayuno de manera habitual y la mayoría de los alimentos los toman en crudo. Eso sí, todos los productos que consumen son cien por cien naturales, sin ningún añadido químico. Los vegetales, cuando los cueces, lo hacen con muy poca agua, casi al vapor.
Además de la dieta, los Hunza mantienen una vida activa -practican, por ejemplo, juegos deportivos-, y en la que estrés o las preocupaciones no tienen cabida. Un pueblo caracterizado por su carácter tranquilo, inalterable y cuyo objetivo es ser feliz.
Si quieres conocer más sobre la dieta de los Hunza, en la galería de imágenes encontrarás 20 de los alimentos básicos en su alimentación.
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