Lipotimia: causas, síntomas y remedios

La lipotimia, también denominada desmayo o síncope, se puede definir como una reducción del aporte sanguíneo que transporta oxígeno al cerebro, lo que puede provoca que podamos perder el conocimiento de manera completa o parcial. Saber cuáles son las causas que pueden estar detrás de una lipotimia, así como conocer sus síntomas, nos ayudará a saber cómo actuar. Si hemos sufrido un episodio de lipotimia, conviene consultar al médico para descartar que detrás pueda haber algún tipo de trastorno de la salud.
Causas Las lipotimias se producen generalmente en situaciones determinadas que nos predisponen a ello. De hecho, hay personas que tienen mayor predisposición a padecer lipotimias, incluso durante la juventud. En otros casos, se trata de un episodio puntual. Las causas más comunes están relacionadas con el estrés, las emociones fuertes, el exceso de calor, la fiebre, permanecer en un lugar cerrado y sin ventilación, por ayuno continuado o por el consumo excesivo de bebidas alcohólicas. En algunos casos, puede producirse tras realizarse una extracción de sangre. Las personas que padecen artrosis cervical, así como las que tienen infrapeso o la tensión arterial baja pueden ser más proclives a padecer lipotimias.
Síntomas Los síntomas más comunes son la aparición de mareo, visión borrosa, náuseas, sudoración, pulso débil, respiración superficial, palidez de la piel y molestias abdominales. Es conveniente sentarse o tumbarse cuando aparecen estos síntomas, sobre todo para evitar caídas o contusiones al golpearse contra algún objeto.
Tratamiento Es conveniente consultar al médico para descartar que detrás de las lipotimias pueda existir, por ejemplo, un problema cardíaco. Hay que subrayar que en la mayoría de los casos las lipotimias tienen un pronóstico bueno y no suelen requerir tratamiento específico, aunque ello no significa que debamos subestimar los síntomas. En cuestión de salud, la prevención como sabemos juega un papel fundamental.

Ante un episodio de lipotimia, conviene que la persona se tumbe en un lugar fresco y ventilado, con las piernas en alto. Toser ayudará a aumentar el riego sanguíneo al cerebro para ayudar a recuperarse. Hay que evitar beber o comer nada hasta que uno esté recuperado.

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