Los golpes en la cabeza, aunque la estructura ósea sea muy resistente, pueden tener severas repercusiones, por lo que no debemos subestimar algunos síntomas que pueden aparecer al momento. Lógicamente, todo depende de la intensidad, si bien los golpes en la cabeza más peligrosos son los provocados, por ejemplo, en un accidente de tráfico o por una caída desde cierta altura y que pueden derivar en una hemorragia interna. ¿Qué señales nos alertan de la gravedad de un golpe en la cabeza? Vamos a ver, más detenidamente, cuáles pueden ser las consecuencias y cómo debemos actuar.
Golpe en la cabeza síntomas
Tras un golpe en la cabeza, en la zona craneal, es habitual que aparezca un chichón, provocado por la acumulación de sangre entre el hueso y la piel. Al quedar fuera del cráneo, los chichones no suponen mayor peligro, desapareciendo al cabo de unos días. Pueden provocar cierta molestia y sensación de dolor. Para mitigar estos síntomas, podemos aplicar hielo en la zona o tomar un analgésico. También es aconsejable, como medida preventiva, no realizar actividades que impliquen esfuerzos durante 24 horas, así como evitar a ruidos o luces intensas.
Cuando tras recibir el golpe aparecen síntomas como pérdida momentánea de conciencia, pérdida de memoria de los minutos anteriores y posteriores al golpe, pérdida de orientación o vómitos intensos, hay que consultar al médico cuanto antes, y de manera urgente si además aparecen otras señales como pérdida de fuerza, dificultades para hablar, pérdida de sensibilidad o convulsiones.
Cuando hay pérdida de conciencia es aconsejable realizar un TAC, una prueba de imagen para confirmar o descartar que haya un hematoma o hemorragia interna en el tejido neuronal del cerebro. Es precisamente en estos casos, al producirse sangrado interno, cuando se puede poner en serio riesgo la vida del paciente. Es fundamental controlar esta hemorragia, ya que podría causar lo que se conoce como tensión intracraneal -la respuesta del cráneo al modificarse su contenido-.
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