Displasia ectodérmica: síntomas, causas y tratamiento

[multipage]
displasia ectodermica 48x48
La displasia ectodérmica es un término médico que, en realidad, engloba a un amplio grupo de más de un centenar de patologías. Tiene una base genética y se caracteriza por escasez de vello corporal y de pelo en el cuero cabelludo (hipotricosis), capacidad de sudoración reducida (hipodidrosis) y carencia congénita de dientes (hipodoncia). Aunque no hay tratamientos específicos, sí se pueden adoptar algunas medidas para aliviar los complejos síntomas que sufren quienes padecen esta patología. [/multipage]

[multipage]
1. Síntomas
sintomas3 48x48
Los síntomas son muy diferentes. En general, la enfermedad implica menor sudoración (al carecer de glándulas sudoríparas), lo que se puede traducir en problemas para regular la temperatura corporal (sobre todo en niños y ante episodios de fiebre). Otros signos son la presencia solo de algunos dientes y con formas anormales, tonalidad anormal de la piel (pálida y fina), pelo fino, ralo e incluso ausente; y uñas de los dedos gruesas y de formas anormales, tendiendo a crecer de forma quebradiza. Las infecciones respiratorias son frecuentes y la sequedad ocular. [/multipage]

[multipage]
2. Causas
genes 48x48
Las causas de la displasia ectodérmica están directamente en los genes. Son varios los genes que pueden contribuir a la aparición de alguna de las patologías englobadas dentro de la displasia ectodérmica, y de ahí sus diferentes manifestaciones. Algunos tipos, de hecho, afectan más a los hombres que las mujeres. Es esencial tener un diagnóstico certero, para lo que es necesario realizar algunas pruebas, como una biopsia de las membranas mucosas, de la piel, así como algunas pruebas genéticas. Una vez que tengamos un diagnóstico preciso, el especialista recomendará las medidas para controlar los síntomas. [/multipage]

[multipage]
3. Tratamiento
tratamiento2 48x48
Aunque no hay una cura definitiva, sí podemos recurrir a algunos remedios para aliviar los síntomas. Entre otros, podemos utilizar lágrimas artificiales contra la sequedad ocular, y para pulverizar las fosas nasales y evitar infecciones los aerosoles salinos. Vivir en un lugar con un clima más frío y apto a nuestra temperatura corporal. Remedios que también ayudan a evitar posibles complicaciones de la enfermedad, como el daño cerebral que puede provocar el aumento de la temperatura corporal o convulsiones por fiebre alta. [/multipage]

Gestione cookie