La dismenorrea, menstruación dolorosa o difícil, provoca dolores en la zona abdominal y pélvica. Algunas mujeres llegan a sentir dolores tan intensos que incluso las impide hacer vida normal, es decir, ir a trabajar o en el caso de las más jóvenes, ir a clase.
La dismenorrea puede darse durante la regla o en los días premenstruales. No sólo son las molestias físicas, sino que también puede afectarte a tu estado emocional haciendo que estés más irascible o melancólica.
Además de los dolores abdominales, hay otra serie de síntomas que también pueden ir parejos tales como:
- Náuseas
- Mareos
- Cansancio
- Dolores de cabeza
- Dolores lumbares
- Ansiedad
- Problemas intestinales (diarrea o estreñimiento)
- Dolores de piernas
Hay dos tipos de dismenorrea. A una se la denomina primaria y sus síntomas aparecen a los pocos años de haber empezado a menstruar, es decir, suele afectar más a las mujeres jóvenes (entre 17 y 25 años)
El segundo tipo es la dismenorrea secundaria, la cual se suele diagnosticar en mujeres a partir de 30 años y que ya han dado a luz alguna vez. En este caso, la dismenorrea está relacionada con otros problemas del aparato reproductor femenino, como puede ser la amenorrea (ausencia de regla), endometriosis o fibromas, por lo que conviene acudir al médico ya que el tratamiento puede llegar a requerir intervención quirúrgica. Además, en algunos casos, los dolores aparecen los días antes de la regla y se intensifican durante la menstruación, siendo como hemos dicho causa de baja laboral.
La menstruación es un episodio doloroso para muchas mujeres. La responsable, en concreto, es la prostaglandina, una sustancia que es expulsada con la regla y que hace que se contraiga el útero.
En la mayoría de los casos, el tratamiento consistirá en un medicamento como el ibuprofeno. Para aliviar los síntomas, también es aconsejable no tomar bebidas estimulantes durante esos días (café, té, alcohol) y no fumar.