No todas las medias de compresión son iguales, ya que hay diferentes tallas y grados de compresión, en función del trastorno para el que hayan sido indicadas como parte del tratamiento. Elegir mal las medias solo hará que los efectos no sean los deseados, de ahí la importancia de tener en cuenta una serie de consejos que nos evitarán equivocarnos en la elección. Vamos a ver, más detenidamente, los 10 consejos básicos a tener en cuenta.
1. Consultar al médico
Si necesitamos utilizar medias de compresión el primer consejo a seguir es consultar previamente al médico para determinar exactamente cuál es el problema venoso. Es importante además porque no todos los trastornos que afectan a la circulación venosa pueden ser tratados con este tipo de medias.
2. Grado de compresión
Hay diferentes tipos medias en función del grado de compresión: debil, media o fuerte. La compresión débil está pensada para mejorar la circulación sanguínea y la hinchazón de piernas durante el embarazo o en caso de aparición de alguna pequeña variz. Las de compresión media están recomendadas cuando las varices son notablemente visibles y conllevan molestias como dolor o cansancio de piernas; y las de compresión fuerte en casos de trastornos venosos severos o tras una intervención quirúrgica.
3. Talla
De igual manera hay que elegir la talla adecuada (en función de lo que miden las piernas), porque una pequeña hará más compresión de la debida, y una talla más grande no hará ningún efecto.
4. Medias cortas o largas
En función de la zona de la pierna en la que tengamos localizada la molestia venosa podremos elegir entre medias cortas (o calcetín) o largas (hasta el muslo). Otra opción es el panty. Las medias cortas están recomendadas cuando el problema está localizado en la parte baja de la pierna o en los pies. La media larga es más adecuada, por ejemplo, para utilizar durante el embarazo por comodidad, sobre todo si además tenemos un problema de incontinencia.
5. Medias para verano o invierno
En función de la estación del año conviene elegir mejor unas medias u otras. Así, en verano, es más recomendable optar por las medias cortas, y en invierno podemos elegir entre el calcetín (perfecto para hombre o mujeres) o el panty.
6. Tipo de actividades diarias
Las actividades que realizamos cada día, si somos más o menos activos, también son importantes a la hora de elegir las medias más adecuadas para que nos permitan mantener el ritmo diario.
7. No utilizar al dormir
Al igual que las medias clásicas, las de compresión son de tejidos lavables y fáciles de estirar para eliminar arrugas, además de poder encontrarlas en varias colores. Se pueden utilizar a lo largo del día.
8. Medias de compresión para deportistas
Cada vez son más los deportistas que utilizan este tipo de medias para mejorar la circulación y, con ello, la resistencia física. En este caso, encontrarás medias de tejidos transpirables, con banda elástica para que no se caigan al realizar movimientos. Las grandes firmas de calzado y ropa deportiva no han tardado en incluir en sus catálogos este tipo de medias.
9. Materiales
Las medias de compresión pueden estar hechas en diferentes materiales, que van desde la goma natural, licra, nylon, microfibra o seda. La calidad de los materiales, lógicamente, determina su durabilidad y mayor resistencia. Es importante que nos resulten cómodas, fáciles de llevar y que sean transpirables.
10. Medias preventivas
No solo como aliado terapéutico, las medias de compresión también se pueden utilizar de manera preventiva. Así, están indicadas en caso de tener que realizar un viaje muy largo o cuando pasamos demasiado tiempo en una misma postura (de pie o sentados).
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