Te enseñamos este tipo de trastorno y si lo puedes llegar a tener. Qué es y cómo saber si tienes limerencia en tu pareja
El amor es una de las cosas más bonitas que pueden llegar a pasarte si es que lo encuentras. Llegar a tener esa confianza, respeto, una persona que realmente te quiera y con la que pasar toda la vida es una de las sensaciones más placenteras y bonitas que existen en el día a día. Y esto es precisamente una de las cosas que provoca que haya ciertas dudas a la hora de valorar si todo tiene un trasfondo con un enamoramiento incluido o si se trata de una obsesión personal.
Sobre esto va dirigido este post, para intentar valorar si realmente estamos enamorados de nuestra pareja o simplemente se trata de una obsesión. Eso es lo que vamos a intentar desengranar comentando los aspectos más importantes y reseñables acerca de la posibilidad de tener el trastorno conocido como la limerencia.
Tener la limerencia y qué es
Lo primero que hay que tener en cuenta es qué es la limerencia en la pareja porque así a bote pronto puede que sea una palabra que acabes de escuchar por primera vez en tu vida. Y lo que hay que tener claro es que este tipo de palabra tiene detrás un significado muy importante y reseñable relacionado con el amor. Se trata de un estado de enamoramiento en el cual dependes emocionalmente de la persona con la cual estás hasta el punto de convertirse en algo obsesivo y de sufrimiento tanto físico como psicológico.
Evidentemente, esta es una obsesión completamente involuntaria donde se busca reciprocidad tanto en pensamientos como en sentimientos y comportamientos hacia la otra persona. Y hay que tener claro que si tienes alguno de los siguientes síntomas es que puedes tenerlo. Esto es lo que ocurre cuando piensas en bucle en la otra persona hasta el punto de relacionar cada momento con ella.
Otro aspecto importante a reseñar es el miedo constante a ser rechazado hasta el punto de crearse ansiedad o temblores en una hipotética situación. Puede llegar a tener fantasías constantes imaginando y recreando con la persona que amas. También conductas compulsivas para comprobar si se siente amada o no. Puedes generar ansiedad y depresión y falta de estabilidad emocional por pensamientos completamente distorsionados. Y todo ello lleva a la idealización de la persona que amas hasta el punto de que no tiene defectos para ti.