Cosas que no debes hacer ante el orgullo en pareja. Te mostramos la actitud que nunca debes tomar ante una persona extremadamente orgullosa, y mucho menos si se trata de tu pareja.
El orgullo es un aspecto del carácter de algunas personas que no lleva en la mayoría de ocasiones a tener buenas relaciones, ni en pareja ni con el resto del mundo que les rodea, y puede venir en su personalidad o bien cultivarse con el tiempo por varias circunstancias, como por ejemplo haber llegado muy alto profesionalmente.
Si tras intentar de dejar de elegir mal a los hombres el destino te ha llevado a estar al lado de un hombre cuyo orgullo le sale por los poros, y a pesar de ello le quieres, es muy importante que tengas en cuenta algunas cosas que nunca debes hacer para no terminar sintiéndote muy pequeñita a su lado.
- No le dejes tener siempre la última palabra: Tanto en una discusión como en una conversación normal, si siempre tiene que colgarse la medalla con sus opiniones, muestra tu lado guerrero y no lo dejes hacerlo, tú también tienes tus pensamientos y él tiene que respetarlos.
- No pares la discusión: Si sueles terminar callada y mostrando sumisión por el simple hecho de no querer discutir más, él se irá haciendo cada vez más fuerte y poderoso, y no dudes que te lo recordará en cuanto tenga oportunidad.
- No te dejes dominar: Si por ejemplo tu chico es dueño de una gran empresa y está acostumbrado a mandar y que los demás obedezcan, hazle saber que en casa no existen categorías y los dos ocupáis el mismo puesto.
- No le hagas sentirse superior: Si le piropeas habitualmente, o le dices todos los días lo bien que hace las cosas, finalmente terminará creyendo que es sencillamente perfecto, y por desgracia nadie lo es.
- No le des siempre la razón: ¿Sabes de sobra que no tiene razón y aun así se la das? Procura buscar los mejores argumentos y que se dé cuenta de una vez de que está equivocado, se le bajará mucho su orgullo.
- No asumas siempre las culpas: Hay personas que saben darle la vuelta a las situaciones de tal manera, que siempre consiguen echarle las culpas a los demás, y lo peor es que ellos piensan que es así. No dejes que esto te ocurra a ti.
- No pidas siempre perdón: Si en realidad eres tú la que estás enfadada por alguna actitud o comportamiento suyo, hazle saber que ha sido él el culpable y debe pedirte perdón, una palabra que seguramente tendrá que ensayar mucho.
- No le dejes mostrar su orgullo constantemente: ¿Estás harta de escuchar a diario frases como “qué guapo soy”, “qué bonito es mi coche” o “qué bien me queda este traje”? Aunque sea verdad párale los pies, no es bueno que se eche tantos piropos.
- No trates de pedirle un compromiso: Ni se te ocurra mencionarle la posibilidad de casaros o tener hijos, deja que sea él el que se dé cuenta que no puede vivir sin ti y dé el primer paso.
- Nunca mires hacia abajo: Para alguien orgulloso ver que la persona que tiene delante agacha la mirada es todo un triunfo, así que no olvides mirarle fijamente a los ojos sobre todo cuando discutáis, te sorprenderá su reacción.
- No toleres palabras insultantes: Si en algún momento ha llegado a faltarte al respeto con palabras subidas de tono, déjale bien claro que tú vales mucho y que no vas a tolerar de nadie, y mucho menos de él que te insulten.
Esperamos que con estos consejos logres modificar la conducta de tu pareja poco a poco, porque está claro que a veces existen miedos en la pareja, pero lo que nunca debe pasar es que alguien tenga miedo a su pareja.
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