Hombres posesivos: señales para detectarlos

Hombres posesivos: señales para detectarlos. Las relaciones de pareja deben basarse en la confianza, la fidelidad, el respeto… pero cuando en lugar de estos sentimientos, lo que empieza a surgir es desconfianza y obsesión, nos encontramos ante una relación que no es nada saludable ni conveniente. Estos sentimientos son los que se pueden derivar de una persona que es demasiado posesiva con su pareja, y muchos hombres que en un principio parecen los más cariñosos y comprensivos, pueden resultar demasiado controladores y posesivos, y esto se detecta teniendo en cuenta su comportamiento y en su trato con la persona que se supone que quiere.
Muchos hombres que en un principio, cuando les conocemos, son muy atentos, te escuchan y están pendientes de ti en todo momento pueden esconder una doble cara. Al principio crees que es el hombre ideal, porque toda su vida gira en torno a ti, pero esta postura se puede volver en tu contra y que con el tiempo ese hombre cariñoso se vuelva en alguien posesivo, que quiere controlarte en todo momento y que no te deja a solas ni un momento.
 

La inseguridad es lo que lleva a los hombres posesivos a considerar que tú eres de su propiedad, y esto es algo que no se puede consentir porque algo tan bonito como es amar puede convertirse en una pesadilla. Por eso hoy vamos a hablar de esos comportamientos y señales que nos advierten que estamos ante un hombre posesivo:
 

• Un síntoma básico de la gente posesiva son los celos, pero no solo en el sentido de una infidelidad de pareja, sino que un hombre posesivo tiene celos de todo lo que te rodea a ti y que no le incluye a él. Puede llegar al punto de que no quiera que salgas con tus amigas o que estés con tu familia porque todo tu tiempo libre quiere que lo pases con él.
  
• Los hombres posesivos no solo quieren que estés con ellos a todo momento y que te dediques plenamente a su persona, sino que incluso pueden querer cambiarte a ti en diversos aspectos, como tu forma de ser o de vestir.
  
• Te controla por dónde sales, cuándo entras, por qué vas a un sitio u a otro en lugar de pasar tiempo con él…, de forma que hasta te hace cambiar tus aficiones para que te adaptes a las suyas y así pasar todo el tiempo que puedas junto a él.
  

Hay distintos tipos de hombres con los que nunca deberías salir, y entre ellos podemos incluir a los posesivos, ya que acabas por dejar de lado tu vida para complacerle a él. Esta es una postura muy egoísta por su parte porque aunque ellos lo justifiquen como amor de verdad, se trata en realidad de una inseguridad tan grande que les lleva a no soltarte ni un momento para que no te puedas escapar.