Hay algunos problemas psicológicos serios en el amor que muchas veces quedan escondidos y asociamos sus síntomas a actitudes más normales o no nos damos cuenta de ellos hasta que es demasiado tarde. Algo así ocurre con la dependencia emocional. La preocupación por tu pareja en todo momento, las atenciones que le profesas… son rasgos típicos de un dependiente emocional, pero pueden parecer las acciones propias de una persona enamorada, por lo que no les damos importancia e, incluso, sientes que haces lo mejor por él y por ti. Pero la dependencia emocional puede ser un problema serio, por lo que hay que detectarlo e intentar ponerle fin.
La dependencia emocional puede parecer un problema menor, pero en realidad no lo es, ya que se trata de un trastorno de la personalidad por el que la persona tiene una necesidad patológica de tener pareja para sentirse completa, útil o realizada. Esto hace que cuando tiene pareja se dedique en cuerpo y alma a ella y, cuando no, la busque desesperadamente.
¿Cómo se detecta la dependencia emocional?
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Las características de la dependencia emocional son fáciles de ver y vienen relacionadas con sentimientos como los celos patológicos, aunque resulta muy fácil también que queden camufladas.
- La autoestima es bastante baja y para sentirse completa necesita tener a su lado a su pareja, lo que le lleva a no tomar decisiones por sí misma sin contar con él y mucho menos decir que no a su pareja. No suele empezar las discusiones aunque algo le siente mal por miedo a que la relación no lo supere.
- Este miedo a ser abandonada hace que necesite que estén recordándole continuamente los sentimientos por ella y aún así no acaba de convencerse de todo.
- Tiene que saber en todo momento dónde está su pareja, lo que hace que la confianza en la pareja se desmorone y que sienta, incluso, celos de sus amigos, aunque una persona dependiente emocional nunca iniciará una confrontación.
Si intuyes que puedes tener este problema, lo mejor es que acudas a un especialista y comiences a tratarlo. O puedes probar con los grupos de ayuda.
¿Cómo se puede superar?
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La dependencia emocional sí se puede cambiar y se puede empezar a hacerlo con pasos muy sencillos. Entre estos pasos se encuentra el comenzar a tomar decisiones por ti misma sin consultarle nada a tu pareja, intentar no pasar todo el tiempo del día con él y ponerte un límite en cuanto a las llamadas telefónicas. Además, puede ser útil que te apuntes a un taller de autoestima o que comiences a hacer planes con otras personas, como tu familia, tus amigos o tus compañeros del trabajo. Cuando veas que la relación sigue adelante a pesar de no estar las 24 horas sabiendo qué hace o estando pendiente de él, habrás dado un paso enorme.
