Ponte el mandil porque la receta de hoy es muy productiva y sencilla. Ya que se trata de una mayonesa sin aceite. Y es que este alimento está riquísimo, pero no hay que negar que engorda mucho. Por eso vamos a hacer una baja en calorías ya que no lleva aceite. Es ideal para acompañarla con un pescado hervido, ensalada de pollo o cualquier cosa ligera. Además es muy fácil de hacer, así que no hay excusas.
Qué socorrida es una mayonesa ¿verdad? Siempre nos puede servir para salvar algún plato que no nos ha salido como nos gustaría. Cuando el pescado no tiene sabor, ahí tenemos el bote de mayonesa, aunque sea light. Ahora bien, hay que reconocer que es un alimento que engorda mucho. Por eso, hoy os traemos una receta sana y light, ya que a nuestra mayonesa no le vamos a echar aceite: el oro líquido lo dejamos para otros platos.
Ingredientes
250 ml de agua
20 g de almidón de maíz
15 cl de vinagre de vino blanco
2 yemas de huevo
1 cucharada de mostaza
Jugo de dos limones
Sal y pimienta
Elaboración
- Disolver la maicena en el agua y llevar a ebullición, teniendo cuidado de no formar grumos, porque eso podría arruinar nuestro trabajo.
- Una vez que la mezcla se ha enfriado, se vierte en la licuadora junto con todos los demás ingredientes de la receta, añadiendo el zumo de limón pasado.
- Mezclar hasta que llegue a la densidad cremosa deseada.
Eso sí, ten en cuenta este superconsejito que te vamos a dar. Esta salsa viene muy bien para acompañar a patatas fritas. Así que con un pelador de verduras, córtalas en rodajas finas, rocía las rodajas con sal y cocer hasta que estén doradas. Luego ponle un poco de esta salsa y a disfrutar.
No te quejarás que hoy te lo hemos puesto fácil. Otro día subiremos el listón y haremos recetas con el aceite como protagonista, como estas de aquí. Hasta entonces, buen provecho.