Celia, la concursante más polémica de esta segunda edición de Masterchef, fue la expulsada. La vegana, es decir que no coma nada que proceda de los animales, abandonó el programa pero además su convicción ya que tuvo que cocinar criadillas de toro. “Aunque haya cocinado carne hay mucha gente que ha sabido qué es el veganismo por mí», declaró la madrileña en el sillón de los eliminados a la presentadora Eva González. Además, el jurado dio un toque de atención a los aspirantes debido a la baja calidad de los platos.
Masterchef va entrando en su recta final y llega lo mejor. Eso lo saben los espectadores que anoche lo auparon a liderar el prime time con más del 20%. Y es que ya vamos conociendo en profundidad a los concursantes y sabemos de sus fobias y sus filias. Sin duda, la que más ha llamado la atención esta temporada es Celia, la madrileña que dejó su trabajo por participar en el reallity gastronómico.
Aunque ella dice que la apuesta ha merecido la pena, anoche fue eliminada por el jurado. Celia se fue emocionada y muy triste porque MasterChef le estaba sirviendo para evolucionar en la cocina y como persona. Dejó sus ideas a un lado al entrar en el programa, ha comido carne, pescado e incluso «ha matado» a una langosta. Y anoche para poner el broche de oro tuvo que cocinar criadillas por primera vez en su vida.
Bueno mejor dicho, tuvo que destrozar, porque lo hizo todo mal. Su cocción no fue la adecuada, su puesta en escena tampoco y así, después de varias semanas en las que rondó la eliminación , el jurado decidió que fuera ella quien colgará el delantal. «Mi corazón sigue siendo vegano pero lo he dejado a un lado para poder aprender», reconoció la aspirante cuando se sentó en el famoso sillón de las eliminaciones junto a Eva González.
Grandes momentos
Sin embargo, hay que reconocer que la madrileña ha sido una de los principales ingredientes del programa y ha dejado grandes momentos. Por ejemplo reflexiones del Feng Shui y de Hipócrates y hasta un léxico propio, en el que está incluido NutriAnanda (de nutrición y felicidad eterna en sánscrito).
Sin duda, un concursante de los que gustan, que son capaces de levantar pasiones como odios. Se la echará de menos. Por cierto, que el jurado anda muy preocupado con el nivel de este año, ya que llevan realizadas ocho galas y de momento no ven evolución. De momento solo quedan ocho en la cocina, y no hay un cocinero que destaque sobre los demás. ¿Tienes tu favorito?
