El objetivo de vida de toda persona es alcanzar la felicidad, pero nadie sabe exactamente cómo se puede llegar hasta ella. Afortunadamente, las enseñanzas budistas nos dan muchas pistas para lograrlo. Te contamos las 12 leyes del karma para ser feliz.
Leyes del karma para ser feliz
¿Te suena el refrán “cada uno recoge lo que siembra”? Pues esta primera ley del karma viene a significar justo lo mismo. Si quieres disfrutar de una vida llena de cosas buenas, no dudes en hacer esas mismas cosas a los demás.
En el mundo existen muchas injusticias, pero dejar que otro las resuelva nunca va a solucionar nada. Implícate y actúa para convertir nuestro planeta en un lugar más bonito donde vivir. Puede que no consigas cambiarlo por completo, pero seguro que puedes cambiar el mundo de más de una persona.
Nunca debes negar las cosas malas que te ocurren o los aspectos negativos de tu ser, sino que has de hacerles frente y asumirlos para poder superarlos. Solo así podrás evolucionar y crecer en todos los aspectos de la vida.
Debes asumir que toda acción tiene consecuencias, ya sean positivas o negativas. Por lo tanto, has de entender desde el minuto cero que si te ocurren cosas malas causadas por una actitud deberás aceptarlas y corregirlas para obtener los resultados deseados en el futuro.
Todas nuestras acciones están conectadas directamente con el universo, por lo que la más insignificante puede desencadenar en una serie de sucesos que condicionen parte de nuestra vida. Es importante pensar siempre en las consecuencias y hacer aquello que creamos correcto.
La vida no es un camino estable, sino que se va transformando poco a poco. Para ser feliz es imprescindible aprender a adaptarse a los cambios y fluir con ellos, tal y como hace el agua que recorre un riachuelo. Solo de este modo serás consciente de lo que ocurre a tu alrededor y sabrás cuál es la mejor opción en cada caso.
Igual que el mundo no se hizo en un día, no podrás alcanzar altos niveles de conocimiento en poco tiempo. La vida es un proceso en el que vas avanzando como si estuvieras subiendo en una escalera, por lo que deberás cargarte de paciencia y no desesperar.
A todas nos gusta que se porten bien con nosotras, por lo que tratar al resto de personas con amabilidad va a ser todo un acierto. No solo conseguirás hacer sentir bien al resto, sino que tú misma te sentirás libre y exenta de odio.
El pasado es algo que no volverá y el futuro lo que todavía no es. ¿Por qué mantener nuestra mente siempre en estos dos puntos? Lo mejor es vivir y disfrutar el momento presente. Evidentemente deberemos hacerlo de forma que no entorpezcamos nuestro camino de cara al futuro, pero sin preocuparnos excesivamente por él.
Cometer errores es algo que no podemos saltarnos por nada del mundo. Nuestras equivocaciones nos regalarán enseñanzas muy valiosas con las que podremos corregir nuestro rumbo hacia el camino más adecuado.
La paciencia es la clave de la felicidad. No hay que desesperar cuando emprendemos una tarea, sino que dedicar el máximo tiempo en ella va a ser clave para sentirnos autorrealizadas. Cuando menos te lo esperes, la recompensa llamará a tu puerta.
Cada vez que emprendas algo nuevo deberás poner todo tu corazón en ello. La energía y esfuerzo que le entregues será lo que le otorgue un valor que también contribuirá a la totalidad del universo. Con esto conseguirás evolucionar y recibir el mayor de los méritos.
¿Qué te han parecido estas leyes del karma? Te recomendamos que también eches un vistazo a las 10 claves de la felicidad según Harvard y que descubras por qué las personas inteligentes no son felices.
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