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Gran Hermano 12+1: Azucena, expulsada de la casa. Ya tenemos el nombre de la segunda expulsada de Gran Hermano. Ayer abandonó la casa Azucena, que estaba nominada junto a sus compañeras Ariadna y Noemí. Finalmente, un 71% de la audiencia decidió que fuera la toledana la que abandonara la casa de Guadalix de la Sierra. La concursante no se sorprendió de ser la más votada por el público y reconoció a Mercedes Milá que no se había integrado entre sus compañeros. La tercera gala dio para mucho y también fue el momento en el que Arístides Alonso, el concursante que compró la plaza por eBay, entró en la casa.
La noche comenzaba con las tres nominadas de esta semana reunidas dentro de la casa de Guadalix de la Sierra. Allí les comunicaron que Noemí era la primera salvada y Ariadna y Azucena tuvieron que ser trasladadas al plató de Gran Hermano, donde las esperaba Mercedes Milá. Durante gran parte de la gala, estuvieron dentro de una habitación incomunicada en la que les mostraron los motivos por los que sus compañeros habían decidido nominarlas. Las líneas seguían abiertas y había todavía tiempo para el arrepentimiento.
Después de que se acabara el tiempo de los votos para el público, les comunicaron que Ariadna se salvaba y que Azucena se convertía en la segunda persona en abandonar la casa de Gran Hermano 12+1. Ariadna volvió con sus compañeros a Guadalix y Azucena entró en el plató.
La concursante expulsada no mostró el carácter al que nos tiene acostumbrados y estuvo comedida y muy sensata. Aceptó los motivos que tenían sus compañeros para nominarla y reconoció que su comportamiento no ha sido el mejor: “En mi forma de hablar soy muy bruta y muy borde” y “soy consciente de que no me he integrado”.
Al conocer el dato de que fue un 71% del público el que había decidido que dejara en concurso, la toledana lo comprendió, ya que “había estado pidiendo que me echaran dos semanas”. Además, dejó muy claro que no le importa haberse ido en la tercera gala, ya que lo que no quería de ninguna manera era ser la primera expulsada.
No todo fueron malas noticias esa noche. El novio de Azucena le comunicó que había encontrado trabajo, lo que alegró mucho a la toledana y Arístides Alonso, el concursante que ha invertido sus ahorros por entrar en Gran Hermano, cumplió por fin su sueño.