Seguro que en más de una ocasión lo has pensado. Estás viendo una película de dibujos animados de Disney y una de las escenas o un detalle te evoca a otra. Pues bien, eso no es fruto de tu imaginación. Ahora, es oficial. Disney ha demostrado que todas las habladurías eran ciertas con una publicación de un vídeo en la página oficial de Facebook donde se puede comprobar. Toy Story, Buscando a Dory o Ratatouille, todas ellas están conectadas. No te lo pierdas.
Cuando Disney y Pixar se unieron, se unieron dos grandes compañías, capaces de hacernos soñar a todos. Sus películas han ido aumentado en calidad y ya forman parte de nuestra vida, incluso de nuestra gastronomía en forma de tartas. Pero seguro que un día estabas viendo una pelí, y una imagen o un pequeño detalle te recordaba a otra. Pues bien, no es que estuvieras loca, llevabas razón.
Así, en el vídeo, de casi tres minutos de duración, vemos a personajes que han formado parte de nuestras infancias fuera de su hábitat natural. Por ejemplo, el triceratops de ‘El viaje de Arlo’ en los recuerdos de Riley, a la que a su vez podemos ver en ‘Buscando a Dory’, y a Arlo como un juguete en las pruebas de ‘Monstruos University’. Incluso algunas de las princesas, con sus tatuajes incluidos, están presentes en más de una película.
El perro de Up! aparece en Ratatouille asustando al protagonista, mientras que la moto que conduce el malo malísimo de esta película gastronómica aparece abandonada en uno de los vertederos en los que Wall-E pasa sus días. ¿Lo habías notado?
Vídeo actualizado
Ya en 2015, la cuenta oficial de Disney publicó en Facebook un montaje en el que se recogían muchos de los cameos realizados por personajes presentados en las películas; pero los años han pasado y, con la salida de nuevos proyectos como ‘Del revés (Inside Out)’, ‘El viaje de Arlo’ o ‘Buscando a Dory. Además muchas de los lugares que aparecen en las películas, existen de verdad.
El vídeo publicado se ha hecho viral y es que de esta manera muchos fans están confirmando que lo suyo no era una obsesión. Seguro que la próxima vez que te sientes a ver una película de este tipo, ya no la verás con los mismos ojos. ¿Verdad?
