Destinos turísticos del mundo que no son como esperabas

Aunque todos los lugares tienen su encanto y lo importante es la actitud con que los visites, la realidad es que algunos de los destinos turísticos más icónicos a veces decepcionan ya que no siempre cumplen las altas expectativas que solemos tener de ellos. Si no quieres arrepentirte de tus vacaciones, no te pierdas todo lo que tienes que saber sobre algunos destinos turísticos que no son lo que esperabas.

La Muralla China

Cualquier amante de la Historia Oriental y de la cultura china soñaría con ir a una de las consideradas Siete Maravillas del Mundo, la Muralla China. Si aún no quedas impresionada, debes saber que es la única obra de arquitectura hecha por el ser humano que se puede ver desde el espacio exterior.

Esta serpenteante construcción con más de 7000 km de largo llama la atención ¿verdad?. Una imagina llegar a un paisaje idílico y onírico, recorriendo solitariamente el suelo de la muralla… Nada más lejos de la realidad, porque por lo general la Muralla China está totalmente llena de grupos de turistas y guías con megáfonos intentando dar sus explicaciones entre la multitud. Si no te gustan las aglomeraciones, probablemente sentirás que lo que podía ser un destino de cuento no es lo que esperabas.

La Mona Lisa en París

No nos entiendas mal, París es uno de los destinos turísticos más atractivos del mundo, sobre todo para los enamorados, pero si vas a pasar tan sólo un fin de semana en la capital del amor, quizás te lleves una decepción cuando acudas al Museo del Louvre a ver la famosa Gioconda de Leonardo da Vinci.

Si eres una apasionada del arte, probablemente esperarás las horas de fila que hagan falta hasta conseguir entrar a la gran sala donde se encuentra esta icónica obra de arte. Aunque su pequeño tamaño suele ser la primera decepción para los que no la conocen, lo peor es la lejanía con que las autoridades del museo permiten observarla (si te olvidas las gafas ese día, estás perdida), custodiada celosamente por una gran cristalera que reflejan la obra.

Pero quizás, lo que más desencanta de la experiencia, es la cantidad de gente con la que tienes que compartir su visión… probablemente tendrás que verla como puedas entre dos cabezas delante tuya. Toda la mañana perdida para ver La Gioconda, sin que te de tiempo a ver el maravilloso Museo del Louvre o los innumerables atractivos de París.

Las playas de Río de Janeiro

Si vas a Río de Janeiro lo pasarás genial bebiendo caipirinhas y bailando samba. Sin embargo, si decides ir a las playas de Río, quizás te encuentres con que no son lo que esperabas, porque por lo general están repletas de gente y no son precisamente el mejor ejemplo de playas limpias (de hecho más de una vez se ha alertado de su toxicidad). Además, en cuanto salgas de la zona turística te encontrarás con la dura realidad de Brasil, la desigualdad social donde la pobreza hace mella en su máxima expresión.

Si Brasil es tu destino soñado, te recomendamos visitar otras playas menos famosas e increíblemente bellas, donde podrás conocer a la gente local y tener una experiencia mucho más enriquecedora.

La Sirenita en Copenhague

Uno de los mayores atractivos turísticos que más expectativas crea es la escultura de La Sirenita, en el puerto de la capital de Dinamarca. Y aunque no podemos desdeñar el trabajo artístico que esta escultura de bronce supone, lo cierto es que a muchos turistas les acaba decepcionando debido a su minúsculo tamaño.

Además, es común encontrarla en mal estado, ya que suele convertirse en la comidilla de activistas y bromistas. En 2017 la cubrieron con pintura roja para protestar contra la caza de ballenas y unos meses después cubierta con pintura azul y blanca. Años anteriores ha sido decapitada, lanzada al mar con explosivos e incluso en una ocasión apareció sosteniendo un juguete erótico.

Stonehenge en Inglaterra

Cuando vemos la idílica foto de las piedras de Stonehenge nos imaginamos una experiencia mística y energética que suele tener como meta el solsticio de verano, una de las fiestas paganas más importantes del mundo. Sin embargo, si acudes en estas fechas, lo que te encontrarás son miles de turistas con los que tendrás que compartir la sensación energética que las piedras ofrecen y que quizás no te dejen disfrutar al máximo de la magia de Stonehenge.

Para colmo, muy cerquita pasa una carretera en la que pasan más de 20.000 coches al día, por lo que el ruido de los coches y las luces al atardecer, suelen estropear el panorama, aunque esto cambiará dentro de poco, ya que en 2017 se aprobó una obra de un túnel subterráneo que cambiaría el paisajismo de la zona.

Si estás buscando destino turístico, no te pierdas la lista con los países y ciudades del mundo para viajar en 2018 y si no tienes mucho dinero, apunta todo lo que tienes que saber para hacer turismo colaborativo convirtiéndote en pet sitter.