Cocinar nos encanta, pero añadir colores llamativos a nuestros platos nos apasiona. Pero, ¿no te ha pasado alguna vez que justo cuando estás inspirada no tienes colorante en casa? Hoy te mostramos una solución natural que te va a encantar. Te mostramos cómo hacer colorante alimentario casero paso a paso.
¿Cómo hacer colorante alimentario casero?
Hacer colorante alimentario casero es muy sencillo. Únicamente deberás conseguir los ingredientes necesarios para cada color e introducirlo en el procesador de alimentos con un poco de agua. Al triturarlo, tendrás tu colorante listo y a punto para ser utilizado. Eso sí, si no vas a utilizarlo en ese momento deberás verterlo en un frasco de vidrio con tapa y guardarlo en el frigorífico para su correcta conservación.
Pero, ¿cuáles son los ingredientes necesarios para cada color? ¡Te lo contamos!
Colorante alimentario casero rojo
El rojo es uno de los colores más sencillos de conseguir. Podrás utilizar zumo de frambuesa, fresa, arándanos, cerezas, granadina o grosellas. No obstante, si buscas algo más intenso puedes hervir un poco de remolacha y colarla.
Colorante alimentario casero rosa
El rosa va a ser una mezcla entre blanco y el rojo anterior. Mezcla una pequeña cantidad de colorante alimentario casero rojo con leche, crema o nata. Añade más rojo o menos dependiendo de la tonalidad que quieras compartir.
Colorante alimentario casero negro
Lo más efectivo para conseguir el negro es moler pastillas de carbón específicas para trastornos alimentarios, aunque si vas a utilizarlo en platos salados podrás conseguirlo más rápidamente con tinta de calamar.
Colorante alimentario casero amarillo
Para lograr el amarillo se puede utilizar el azafrán. Para ello, echa un poco de agua en un cazo y echa un poquito de azafrán hasta obtener el color deseado.
Con el amarillo has de tener en cuenta una cosa: al oscurecerlo con negro no obtendrás naranja, sino verde oscuro.
Colorante alimentario casero naranja
Si quieres obtener el color naranja, deberás rallar y extraer el jugo de la cáscara de naranja o de una zanahoria. Además, también podrás conseguirlo mezclando colorante rojo y colorante amarillo.
Colorante alimentario casero azul
Si quieres obtener colorante alimentario casero azul, deberás extraer el jugo de los arándanos azules. Si quieres oscurecerlo, añade colorante negro.
Colorante alimentario casero verde
El colorante alimentario verde lo hallarás hirviendo unas hojas de espinaca, té verde o matcha y utilizando el agua sobrante. No obstante, también podrás obtenerlo al mezclar un poco de colorante azul con otro poco de amarillo.
Colorante alimentario casero violeta
Por último, el colorante alimentario casero violeta podrás conseguirlo mezclando colorante azul y rojo, aunque también extrayendo zumo de moras.
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