Calientapiés de trigo: adiós a los pies fríos. Muchas personas se ven afectadas por un problema, en su mayoría derivado de la mala circulación que implica que los pies parezcan no entrar en calor, de hecho no es que lo parezca sino que tienen los pies fríos con lo que tienen la sensación de no entrar nunca en calor. Para aquellas personas que sufran este problema, al menos cuando estén en casa, tienen una fácil solución gracias a las bolsas de trigo que permiten mantener el calor durante bastante tiempo para conseguir que los pies entren en calor.
La mala circulación afecta a una gran parte de la población española y mundial. Los problemas derivados de ello son varios, como por ejemplo las antiestéticas varices para las cuales hay una operación específica.
Por otro lado, la mala circulación también provoca otra serie de problemas, como la hinchazón de las piernas, para la que se recomienda que cuando estemos en casa, por ejemplo, que nos podemos poner más cómodos, tengamos las piernas en alto, que nos demos masajes para mejorar la circulación semejantes a los que nos hacemos para la celulitis así como evitar en la medida de lo posible cruzar las piernas o ponernos ropa muy ajustada que impiden la correcta circulación de la sangre.
En definitiva, los problemas circulatorios provocan también que tengamos los pies frío, y por regla general aquellas personas que tienen los pies fríos también suelen tener las manos. Para esta última no tenemos una solución que no sean unos guantes, sin embargo para los pies ha llegado la revolución con las zapatillas y bolsas de trigo.
¿Cómo son y cómo se usan?
¿Os acordáis de las bolsas de antiguamente en las que se introducía agua caliente y se utilizaban para calentar los pies cuando ibas a la cama? Pues el sistema ha variado un poco y por qué no decirlo, ha mejorado considerablemente.
Ahora este tipo de bolsas realizadas en tela, contienen trigo o diferentes cereales que conservan el calor durante mucho más tiempo. además la ventaja que tiene este sistema con respecto al antiguo es que cuando el cereal deja de estar caliente, la bolsa en general mantiene parte de su calor con lo que nunca se quedará totalmente fría.
El procedimiento para calentarlo es muy simple y consiste en meter la bolsa que tiene el cereal dentro del microondas. Lo calentamos durante tres minutos aproximadamente y una vez que está caliente lo metemos dentro de la funda en la que posteriormente colocaremos nuestros pies.
Es simple ¿verdad? Pues esto no es todo, y es que este sistema ha ido evolucionando hasta que ya no nos conformamos con una simple bolsa sino que también han creado un sistema mucho más eficiente: zapatillas. El sistema es exactamente el mismo que el anterior por lo que con estas zapatillas siempre tendremos los pies calentitos.
Por último, para todos aquellos que tienen problemas de cervicales y necesitan calor directo, también existen otro tipo de bolsas especiales, con el mismo sistema, que podemos utilizar para otro tipo de dolencias. ¡Ya nos contarás que tal se vive con los pies calentitos!
