Árbol sintético o natural: Ventajas e inconvenientes

Se acerca la Navidad y con ella las típicas decisiones que tenemos que tomar cada año. Seguro que cuestiones como “¿Qué comeremos en las fiestas?” o “¿Cómo puedo ahorrar comprando regalos a mis familiares?” ya rondan por tu cabeza. Por ello, te traemos una de las decisiones que siempre dejamos hasta último momento para que puedas reflexionar sobre ella: la elección del árbol de Navidad. Te contamos las ventajas e inconvenientes de elegir un árbol sintético o natural.

Árbol sintético

Ventajas

La principal ventaja que ofrecen los árboles sintéticos es que solo tendrás que preocuparte una vez de comprar el árbol, ya que el mismo podrá servirte durante muchos años. Es precisamente esta longevidad lo que te permitirá ahorrar muchísimo dinero que podrás gastar en otras cosas, como en regalos o en preparativos.
Además, resulta mucho más cómodo, ya que no ensucia, su transporte es relativamente ligero y puede guardar en una caja de pequeño tamaño.

Inconvenientes

Hay personas que eligen estos árboles porque a simple vista parecen menos tóxicos, pero el plástico no es un material que se lleve especialmente bien con la madre naturaleza. Desde su fabricación hasta el momento en el que decidas desecharlo, los árboles sintéticos liberan una cantidad enorme de toxinas que tardan mucho tiempo en descomponerse. Por otro lado, también hay que decir que son estéticamente menos impresionantes que los naturales.

Árbol natural

Ventajas

Si lo que buscas es un árbol cargado de tradición, el natural va a ser tu mejor elección. Lo primero que salta a la vista es su estética, y es que es mucho más imponente y sólida que el de un árbol sintético.
Aunque pueda parecer contradictorio, utilizar un árbol de Navidad natural es mucho más ecológico que uno sintético, ya que generan unos residuos biodegradables muy amistosos con el medio ambiente. Además, el hecho de que produzca oxígeno te ayudará a renovar el ambiente, creando una atmósfera muy agradable.

Inconvenientes

Obviamente, los árboles naturales no duran eternamente. Cada año tendrás que comprar uno distinto, lo cual no solo supondrá una elevada suma de dinero que deberás gastar cada vez que se acerque la Navidad, sino que también tendrá un gran impacto en la cantidad de árboles talados. De hecho, algunos vendedores los talan directamente de los bosques, por lo que hay que llevar mucho cuidado y asegurarnos de que provienen de viveros especiales.
Por último, estos árboles suelen estar reservados a personas que cuentan con una casa de grandes proporciones, ya que incluso después pueden trasplantarlos al jardín. No obstante, solo tú podrás determinar si en tu casa hay un lugar perfecto para incluir uno de estos árboles, el cual puede llenar tu casa de alegría durante las fiestas navideñas.

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