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Louis Vuitton en Paris Fashion Week O/I 2013-14: Kate Moss deslumbra en la pasarela. La sensualidad de una habitación de hotel de los años 20 ha sido el lugar elegido por Marc Jacobs para presentarnos la colección otoño/invierno 2013-14 de Louis Vuitton, que además tenía una huésped de lujo, Kate Moss, que ha desfilado al final de estas cincuenta salidas con peluca garçon morena y un vestido que es una oda al camisón. Porque estas prendas, junto con los pijamas, han sido los dos puntos sobre los que ha girado esta nueva espléndida colección de la maison francesa.
París Fashion Week ha echado el telón, pero no hay mejor manera de hacerlo que desde la habitación de un misterioso hotel de los años 20 al que nos ha llevado Marc Jacobs en la presentación de la colección otoño/invierno 2013-14 de Louis Vuitton.
Si para presentarnos sus propuestas damero de primavera que son la locura de las celebrities, recreó un centro comercial con sus escaleras mecánicas, en esta ocasión el diseñador ha preferido los pasillos de un enigmático hotel, donde nos esperan las modelos en camisón o pijama, puesto que estas son las dos principales tendencias de la maison para la próxima temporada.
Los años 20 están fielmente reflejados en la elegancia de las modelos, con sus pelucas de corte garçon y su caminar sigiloso, para no hacer ruido en estas habitaciones, que cuentan con una huésped muy especial, puesto que Kate Moss ha sido una de las elegidas para mostrar las propuestas de su gran amigo Marc Jacobs.
Como sucedía a principios del siglo pasado, las mujeres lucen sensuales vestidos de seda que parecen lencería, decorados con encajes y con pequeñas flores, en colores cálidos, pero donde también tiene su sitio el negro, pero que además se colocan sobre los hombros espectaculares abrigos de piel que llegan hasta los pies.
Pero la mujer de Louis Vuitton no solo sale a la calle en camisón, sino que también lo hace en pijama, con dos piezas con el mismo color y estampado, pero con una elegancia que solo las creaciones de Marc Jacobs podrían tener.
Nada de grunge ni aspecto desaliñado como en las propuestas de Saint Laurent, totalmente opuesto a la estética elegante, chic y ultrafemenina que nos muestra la maison francesa, llevada a su máxima potencia con la salida de una espectacular Kate Moss con un vestido-camisón de transparencias que solo ella puede lucir como si no llevara nada y realmente estuviera en la habitación de un hotel.
Si Chanel presentaba una moda globalizada, la de Louis Vuitton es para mujeres que se atrevan a llevar la sensualidad de una habitación de hotel a la calle, y pasear por ella como si lo hicieran por los pasillos del hotel, aunque también lo pueden hacer en traje de chaqueta, uno de los clásicos de la casa francesa.
El front row no solo estalló en aplausos con la salida de una Kate Moss morena a la pasarela, en lo que desde algunos sectores se indica que puede ser su último desfile, si no que otra de las ovaciones fue para el diseñador, Marc Jacobs, y no sólo por su obra sino porque se atrevió a salir con un pijama rojo, sólo él puede hacerlo.
Una maravillosa manera de dar por terminado este carrusel de la moda que nos ha llevado a las mejores ciudades del mundo para conocer las tendencias otoño/invierno 2013-14 y que hemos terminado en el hotel de la sensualidad de Louis Vuitton.
