¿Tu hijo es un consentido? Responde a las preguntas de nuestro test y sabrás si estás tratando con un diablillo caprichoso o, por el contrario, con un niño digno de alabar.
La disciplina es importante en la educación de los niños, pero no siempre funciona. Hay niños muy buenos, otros con un carácter difícil de manejar dentro y fuera del hogar. Consentirlos complica las cosas considerablemente, sobre todo cuando ya de por sí son intolerantes a las reglas.
¿Y tu hijo cómo es, un demonio o un angelito pacífico y controlable? ¿Has echado a perder su educación o has sido capaz de gestionar bien sus caprichos? Para averiguarlo, haz el test.