La televisión, junto al móvil y la tablet, se ha convertido en un instrumento que nos ayuda en gran medida a mantener entretenidos a nuestros pequeños. Gracias a ella podemos hacer las tareas de la casa o conversar tranquilamente con otra persona sin sufrir constantemente por si nuestro hijo estará bien. Pero eso no quiere decir que los niños puedan verla todo el tiempo que quieran, ni mucho menos que sea recomendable para su salud. Te mostramos el tiempo recomendado y consejos para utilizar la televisión correctamente.
Tiempo recomendado
La televisión y canales de Internet como Youtube son muy socorridos cuando necesitamos que nuestro hijo se comporte bien y tranquilo durante un evento importante, pero debemos tener en cuenta que únicamente debería exponerse a estos programas durante un tiempo limitado.
La Academia Estadounidense de Pediatría dictaminó que el tiempo de visionado dependía de la edad del niño. Para empezar, los niños menores de 3 años deberían tener prohibida la televisión, incluso si se trata de dibujos completamente inofensivos. Esto ocurre porque a esta edad tan temprana los niños todavía no han aprendido bien cómo funciona el mundo, y exponerlos a una pantalla que atrae toda su atención y les hace perder el interés por conocer el resto de elementos que lo rodean.
Es a partir de esta edad cuando se les debería permitir ver la televisión, pero únicamente durante una o dos horas diarias. Es necesario que desde el principio le marques los límites y controles el tiempo en el que ve los dibujos, dentro del cual entrarán obviamente todos los momentos del día que el niño vea un vídeo. Por supuesto, también deberás sentarte a su lado y elegir entre ambos qué programa vais a ver, ya que no es recomendable que a esta edad se le permita ver lo que quieran.
Cuando los niños ya cumplen los 4 o 5 años, ya saben qué quieren ver y cuándo lo emiten. Es aquí cuando le puedes dar más libertad, pero por supuesto no deberás pasar del límite de las dos horas, ya que es en este momento donde comienzan a darse los primeros síntomas de falta de atención y fracaso escolar.
Consejos
No cabe duda de que la televisión es un instrumento que puede tener finalidades didácticas, pero no debemos olvidar que se trata de un aparato eminentemente lúdico, es decir, que lo que prima es el entretenimiento. Esto hace que debamos estar alerta, ya que los niños siempre van a aprender nuevas palabras o expresiones que repitan sus personajes favoritos, y algunas de ellas pueden ser palabrotas de las que las madres siempre huimos por el bien de nuestros hijos. Pero este no es la peor consecuencia, y es que un visionado demasiado prolongado en el tiempo puede transformar ese hábito saludable en un vicio, lo cual tendrá repercusiones físicas y mentales para el pequeño. De hecho, existen estudios que relacionan directamente el tiempo que un niño ve la televisión con la probabilidad de que en el futuro sufra obesidad, problemas de espalda y dificultades de visión.
Para evitar que el niño se centre únicamente en las pantallas, enséñale a disfrutar de otras cosas como puede ser leer, contemplar naturaleza, investigar o escuchar música. Y, por supuesto, es muy importante que no instales en su habitación ninguna pantalla para mantenerle alejado de ellas todo el tiempo posible. Con estos simples consejos conseguirás que tu pequeño utilice correctamente la televisión y sólo obtenga consecuencias positivas derivadas de ella.
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