¿Afectan los partos con cesárea a la evolución humana? La respuesta, según la ciencia, es que sí. Al menos así lo apunta un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Viena, y publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, y que indaga en los efectos que puede tener el procedimiento quirúrgico que se aplica cuando el bebé no puede nacer por parto natural. En concreto la investigación se centra en las cesáreas practicadas cuando el bebé es demasiado grande (lo que se denomina desproporción cefalopélvica) o cuando la pelvis de la madre es demasiado estrecha para el tamaño del bebé. En ambas situaciones, si no se practicara una cesárea, tanto el bebé como la madre podrían morir, si bien los investigadores consideran que esta selección natural evitaría la herencia genética de partos difíciles. Atendiendo a las leyes de la evolución, las mujeres con la pelvis más o menos ancha y los bebés con un tamaño no demasiado grande serían las que tendrían mayores probabilidades de sobrevivir y, por tanto, de transmitir una herencia genética que reduzca los partos complicados. Una teoría que, sin duda, genera opiniones encontradas entre los expertos.
La investigación parte de un dato a tener en cuenta, y es que desde los años 50 han aumentado en un 20% el número de cesáreas que se practican en el mundo por casos de desproporción cefalopélvica, es decir, cuando el tamaño del bebé es demasiado grande para nacer de manera natural. Al aumentar la tasa de supervivencia de bebés grandes al nacer, así como de las probabilidades de las mujeres de pelvis estrecha de tener hijos, los autores de este estudio consideran que se frena la evolución como especie.
Hace un siglo, tal y como apunta Philipp Mitteroecker, uno de los autores del estudio de la Universidad de Viena, las mujeres con pelvis estrecha no habrían sobrevivido al parto. Ahora, gracias a los avances de la medicina, sí, pero esto tiene como efecto que también traspase sus genes a sus descendientes, genes que codifican información para una pelvis estrecha. En la década de 1960 los casos de desproporción cefalopélvica se situaban en 30 por cada mil partos; hoy esa tasa se ha elevado a 36 por cada mil.
Indicaciones de cesárea según la OMS
No es la primera vez que los partos con cesárea están en el centro del debate. Así, hay que recordar que la Organización Mundial de la Salud, OMS, insiste en que debe ser una práctica excepcional, y que ningún país debe superar la tasa del 10-15% de nacimientos por cesárea. Tasa que la gran mayoría de países desarrollados supera, entre ellos España (superior al 20%). La cesárea, según la recomendación de la OMS, se considera necesaria cuando el parto vaginal ponga en riesgo la vida de la madre o del bebé, por ejemplo, en caso de parto prolongado, sufrimiento fetal o cuando el bebé está colocado en una postura anormal.
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