¿Cómo actuar si mi hijo pinta en las paredes? Si sabes quién es el autor de esas pequeñas obras de arte inesperadas, conviene detenerse un momento antes de enfadarse porque, contrariamente a lo podamos pensar en un primer momento, no encierran un mal comportamiento. Si tienes un pequeño artista en casa al que le vuelve loco decorar las paredes, conviene descubrir las razones antes de regañarle.
Desde que el niño empieza a dar sus primeros pasos hay un montón de rincones que pueden despertar su curiosidad, y espacios que consideran idóneos para plasmar toda su creatividad. Pintar en las paredes, o en cualquier otra superficie, se convierte en una forma de expresarse, de desarrollar sus habilidades y su destreza con las manos.
¿Por qué los niños pintan las paredes?
A partir de un año los más pequeños empiezan a desplegar sus habilidades con las pinturas. Las paredes son las superficies preferidas por los niños para expresar a través de los trazos de los dibujos sus pensamientos y emociones. Una forma natural de desarrollar su capacidad expresiva. Dibujar, jugar con las pinturas y los colores, es una de las actividades que despiertan la creatividad de los niños.
El papel se queda pequeño para los niños cuando empiezan a hacer los primeros garabatos, primero porque no pueden agarrar bien las pinturas, y en segundo lugar porque se dejan llevar por su instinto y todavía no han comprendido que la pared no es una pizarra.
¿Cómo enseñar a tus hijos a no pintar en las paredes?
Si tu hijo pinta las paredes hay que buscar una solución que le permita expresarse libremente, una alternativa más idónea que las paredes, muebles o cualquier otra superficie de la casa. Estos son algunos consejos para poner en práctica y educar a tus hijos sin reprimir sus habilidades creativas y su desarrollo cognitivo y emocional.
- Como padres, hay que hablar con el niño para explicarle cuáles son los espacios donde sí puede pintar y cuáles no. Poner reglas también forma parte de su educación.
- Para enseñarle qué material puede utilizar, conviene regalarle una caja donde pueda guardar todas las pinturas, cuadernos de dibujo…
- La habitación infantil es perfecta para colocar las originales paredes de pizarra para niños, o simplemente dejar una de las paredes libre, forrada por ejemplo con papel de embalar, para que puedan llenarla de colores.
- Otra alternativa es colocar un vinilo en los zócalos o papel para que pinte sin estropear la superficie.
- Coloca un mantel o tela en la mesa donde dibuja habitualmente, y sustituir los rotuladores o ceras por pinturas lavables específicas para niños.
- Si persiste en seguir pintando las paredes, conviene involucrar al niño en la limpieza de las superficies que ha pintado.