Métodos anticonceptivos durante la lactancia. Aunque es cierto que durante los primeros meses de la lactancia se produce una disminución de la hormonas responsables de la ovulación, sí existen posibilidades de volver a quedarse embarazada si no se utiliza ningún método anticonceptivo. Pero, ¿pueden resultar perjudiciales si al tiempo estás dando de mamar a tu bebé y afectar a la calidad y cantidad de leche? ¿Cuál es el más indicado? ¿Es la lactancia un método anticonceptivo natural?
Durante los primeros meses del periodo de lactancia materna, en la etapa post parto, aumentan los niveles de prolactina (hormona responsable de la lactancia), mientras que disminuyen las responsables de la ovulación. Esto reduce las posibilidades de volver a quedarse embarazada, pero ello no quiere decir que sea un método fiable al cien por cien ni que pueda reemplazar a los métodos anticonceptivos. De hecho, el ciclo de ovulación se activa antes de finalizar la lactancia, por lo que es el método más seguro si todavía no deseas volver a ser madre. Sin embargo, al estar dando el pecho, ¿cuál es el método anticonceptivo más adecuado? ¿Afecta a la calidad y a la cantidad de la leche? Así, por ejemplo, los estrógenos (presentes en los anticonceptivos orales), si pasan a la leche materna, pueden provocar cambios hormonales en el bebé y alterar la propia lactancia. Es importante consultar al ginecólogo sobre los distintos métodos y sobre cuál es el más recomendado en cada caso.
Métodos anticonceptivos más eficaces
Tras el embarazo y el parto, el cuerpo de la mujer necesita recuperarse de los cambios sufridos, una recuperación física y emocional, por lo que se recomienda esperar al menos 40 días (cuarentena) antes de retomar las relaciones de pareja. Entre los métodos anticonceptivos eficaces y seguros durante esta etapa se encuentran:
- Preservativo: El método anticonceptivo más utilizada es también el más recomendado durante la lactancia materna, seguro para la mujer y para el bebé.
- DIU (dispositivo intrauterino): En este caso, el DIU se coloca en las semanas posteriores al parto (en el caso de cesárea se debe esperar al menos un mes para colocarlo).Es un método reversible que puede durar hasta cinco años.
- Hormonas inyectables: Su contenido se limita a progesterona.
- Minipíldora: Similar a la píldora anticonceptiva, aunque en este caso se sustituye la progesterona por el gestágeno. También es un método utilizado para regular los ciclos menstruales. Eso sí, debe tomarse cada día y siempre a la misma hora.
- Implante subcutáneo: Se trata de una varilla fina de plástico que se implanta debajo de la piel y que produce progesterona.
- Anillos vaginales: En este caso, los anillos (colocados a las seis semanas) liberan la progesterona.
En la elección del método anticonceptivo también hay que tener en cuenta los efectos secundarios que, en algunos casos, pueden aparecer. En el caso del preservativo, salvo si existe alergia al látex, no hay contraindicaciones. Por su parte, en el caso de las hormonas inyectables sí pueden aparecer efectos secundarios como el aumento de peso, dolor de cabeza, cambio de humor o náuseas. En cuanto al implante subcutáneo, puede influir en el ciclo menstrual.
Lactancia como método anticonceptivo: Amenorrea
Tal y como hemos señalado antes la lactancia reduce las posibilidades de quedarse embarazada, al menos durante los 3-6 primeros meses, periodo durante el que el bebé se alimenta solo de leche materna. No obstante, tal y como señalan los médicos expertos en Ginecología, no es un método fiable para evitar un embarazo no deseado. Además, los médicos aconsejan dejar al menos un margen de seis meses (un año en el caso de cesárea) entre dos embarazados. Este periodo en el que nuestro cuerpo ejerce de anticonceptivo natural se denomina amenorrea de la lactancia, o ausencia de la menstruacción desde el parto. Tras la primera regla, o cuando se empieza a dar una alimentación suplementaria al bebé y empezamos a darle el pecho a intervalos mayores de tiempo, la eficacia de la lactancia como anticonceptivo disminuye rápidamente.