Mareo de los niños en el coche: Cómo actuar. Es frecuente que cuando algunos niños emprenden un viaje por carretera se mareen y tengan ganas de vomitar lo que supone que el trayecto se convierta en una odisea. ¿Qué podemos hacer para evitar que los más pequeños se mareen? ¿Cómo debemos actuar cuando nuestro hijo nos dice que no se encuentra muy bien? Toma nota de estos consejos y consigue que vuestros viajes en familia no se conviertan en un auténtico trastorno para los niños y para vosotros.
Sensación de inestabilidad, sudor frío, cambio de color del rostro que se vuelve pálido, náuseas y ganas de vomitar son los principales síntomas del mareo. Para prevenir que los niños se lo sufran y podamos tener un viaje tranquilo en familia, es importante tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
- No os subáis en el coche nada más comer y procura que no tomen leche o bebidas con gas antes del viaje.
- Juega y habla con los niños para mantenerlos entretenidos. También podéis ir cantando canciones.
- Dales un chicle o caramelo durante el camino. Si tienen hambre puedes darles también alguna chuche o un dulce pero en poca cantidad.
- Intenta evitar que los niños vayan leyendo en el coche.
- Si el viaje es largo, haz una parada cada hora y media o dos horas para que los pequeños (y también los grandes) respiren aire fresco y estiren las piernas.
- No fuméis en el coche y mantener un ambiente fresco dentro de él.
No obstante, si a pesar de estos consejos el niño se marea es importante mantener la tranquilidad para que el pequeño no se ponga peor. Lleva siempre a mano bolsas, toallitas, ropa para cambiarle y una botella de agua con azúcar para dársela poco a poco (pero con frecuencia) si finalmente el niño vomita. Además, puedes ponerle un trapito humedecido sobre la frente para conseguir que se siente más aliviado.