El estreñimiento no es solo cosa de adultos, sino también de niños. ¿Cuáles son las causas del estreñimiento infantil?, ¿cuáles son las soluciones más eficaces? Estamos ante una alteración gastrointestinal que, con la revisión de la dieta y la adopción de algunos hábitos saludables –como el cuidar la hidratación, hacer deporte o masticar despacio-, se pueden combatir y aliviar sus síntomas. Determinados alimentos son esenciales en la dieta de los niños para favorecer el tránsito intestinal y evitar el estreñimiento. Y contamos con otro aliado, las tisanas o infusiones que activan el intestino.
Cansancio, pérdida de apetito, malestar general y dolor de estómago son, entre otros, los síntomas más comunes que nos alertan de un problema de estreñimiento. En los niños, la edad más proclive a padecer este tipo de malestar o dolencia está entre los dos y los cuatro años. La dieta, como veremos a continuación, juega un papel esencial en su prevención.
Dieta: soluciones al estreñimiento
Para empezar el día, y como una de las medidas más eficaces para combatir el estreñimiento, conviene tomar un desayuno nutritivo y completo. Un desayuno con un elevado contenido en fibra. Aporte de fibra con los zumos (naranja, albaricoques y ciruelas contienen un aporte importante de fibra soluble), los batidos (plátano y yogur para restaurar la flora intestinal) y los cereales (cereales integrales, como los copos de trigo, mezclados con leche o yogur, para aportar fibra insoluble).
Hay otros alimentos a los que también conviene prestar atención para aliviar los problemas de estreñimiento:
- Mermelada de ciruelas: Sin duda, las ciruelas están consideradas uno de los laxantes naturales más efectivos. Podemos incluirlas en la dieta de los más pequeños en forma de mermelada o de frutas secas. Unas tostadas con mermelada de ciruelas en el desayuno activa el organismo y el intestino.
- Nueces y tomate: Las nueces son apreciadas por su contenido en fibra, Omega 3 y magnesio. Contenido que las convierte en un buen aliado para regular el tránsito intestinal. El tomate, por su parte, evita los problemas gastrointestinales. Ambos alimentos podemos combinarlos, por ejemplo, en una ensalada.
- Uvas pasas: Al igual que las ciruelas, las uvas pasas mejoran el tránsito intestinal. Se pueden tomar solas o como aderezo de algunos platos (por ejemplo, pollo).
- Yogur y lácteos fermentados: Este tipo de alimentos ayuda a regenerar la flora intestinal y, por tanto, a mejorar el tránsito. Podemos añadir un puñado de muesli.
Hábitos saludables
Además de la dieta, como hemos señalado anteriormente, hay otra serie de hábitos a promover para prevenir el estreñimiento infantil. Así, es importante hacer ejercicio físico de manera regular, ya que mejora y acelera el metabolismo digestivo. La hidratación también juega un papel fundamental. Beber agua es esencial para estar bien hidratados y, sobre todo, evitar el estreñimiento. También es aconsejable masticar despacio la comida, ya que mejora el tránsito de los alimentos por el tracto digestivo. Un masaje abdominal también ayuda a mitigar los síntomas.
Tisanas e infusiones
Para activar el intestino hay dos tisanas o infusiones que podemos dar a los más pequeños media hora antes de las comidas:
- Manzanilla: Combinada con anís verde alivia los problemas gastrointestinales. Añade una bolsita de manzanilla en un vaso de agua hirviendo, deja reposar y añade una pizca de semillas de anís verde (con efecto laxante).
- Menta poleo: Digestiva, ayuda a estimular el tránsito intestinal.
