Doodle Duvet Covert: Un edredón en el que se puede pintar. Los más pequeños de la casa se lo pasarán en grande con esta origina funda nórdica en la que pueden dibujar todo lo que quieran. Si tus hijos son unos pequeños aprendices de Picasso y les encanta dibujar en los lugares más insospechados y, a veces los más inapropiados como pueden ser las blancas paredes de tu casa, con este original edredón conseguirás que se entretengan pintando lo que más les guste sin tener que preocuparte porque lo estropeen.
Stitch Designworks ha creado esta funda nórdica llamada Doodle Duvet Covert con un aspecto similar al de una gran hoja de cuartilla en al que no faltan el espacio para el margen, los renglones y los dibujos de los agujeros como si luego fuera a guardarse en cualquier archivador.
Un artículo muy especial en el que los niños pueden dibujar todo lo que quieran personalizándolo a su antojo con los ocho rotuladores de diferentes colores que se incluyen con la funda. Y lo mejor es que cuando se cansen de dormir con los mismos dibujos, sólo hace falta lavarlo y… ¡magia! el edredón se convierte de nuevo en una hoja de libreta en blanco para que los más peques puedan dejar volar de nuevo su imaginación y pintar o escribir todo lo que quieran.
Un regalo muy original con el que no sólo disfrutarán los niños, sino que toda la familia podéis dejar salir vuestra vena artística y decorar el edredón como más os guste. Inspiraros en la estación del año, dibujar los personajes de cuento favoritos de vuestros niños, pintar un lugar al que os gustaría viajar o ¿por qué no? atreveros y hacer un autorretrato de toda la familia.
La funda que mide 140 x 200 cm por ahora sólo puede adquirirse online en la página de Stitch Designworks y cuesta 45 libras (aproximadamente unos 51 euros).