Los cambios físicos se perciben a primera vista, pero el embarazo también conlleva numerosos cambios emocionales que hacen que la futura madre sea más vulnerable a padecer cambios de humor, cuadros de ansiedad, tristeza o depresión. De hecho, según los expertos, el embarazo puede considerarse como uno de los periodos vitales con mayores implicaciones emocionales. Todo embarazo, sobre todo en el caso de las mamás primerizas, genera dudas y preocupaciones que pueden incrementarse a medida que se acerca el momento del parto. Canalizar todos estos pensamientos y sentimientos es fundamental para no caer presa de la ansiedad, la cual puede tener consecuencias negativas para la salud de la madre y del futuro bebé.
Evitar ansiedad en el embarazo
Cada mujer vive de una manera diferente la experiencia emocional del embarazo, de mayor o menor intensidad en función de aspectos como la situación social y económica en el momento del embarazo, la relación con su pareja, familia y amigos y, en el caso de mujeres que ya han sido madres, las experiencias vividas con anterioridad. La personalidad de la mujer también es determinante, ya que las mujeres inestables emocionalmente antes del embarazo son más proclives a padecer mayores cambios psicológicos durante los meses de gestación.
El ejercicio físico durante el embarazo reporta numerosos beneficios, lógicamente evitando los deportes o ejercicios en los que haya riesgo de caídas y golpes y adaptando la actividad a la condición física de la madre y al mes de gestación. Así, el ejercicio físico ayuda a mantenerse en buen estado físico, a prevenir algunas de las molestias comunes asociadas al embarazo (cansancio, dolor de espalda, estreñimiento) y a aliviar la ansiedad.
Dentro del capítulo de las actividades físicas no podemos olvidar el yoga y los beneficios que reporta en el embarazo, especialmente para favorecer la relajación y evitar el estrés y la ansiedad. Yoga, meditación o mindfulness pueden sernos de gran ayuda durante esta etapa.
Las clases de preparación también enseñan a las futuras mamás técnicas de relajación que ayudan a reducir la ansiedad, sobre todo durante el preparto y el parto.
Cuidar la alimentación es fundamental durante el embarazo, y en este caso por un doble motivo, la salud de la madre y la del futuro bebé. Una alimentación variada y equilibrada como lo es la dieta mediterránea que, además, nos ayudará a combatir los episodios de ansiedad de manera natural. Así, los alimentos ricos en vitaminas B y C y en minerales como hierro y fósforo actúan sobre el sistema nervioso y ayudan a mejorar el estado de ánimo. De la dieta hay que desterrar las bebidas con cafeína y, sobre todo, las bebidas alcohólicas.
Es fundamental cuidar el descanso, siendo conveniente dormir al menos 8 horas diarias. Las siestas durante el día ayudan a reponer las energías. Un vaso de leche caliente antes de acostarte ayuda a conciliar mejor el sueño. También conviene no acostarse nada más terminar de cenar (esperar, al menos, una hora).
Dar un paseo, leer un libro, escuchar música, ver una película, pintar… son actividades que ayudan a relajarse, así como aquellas que nos permiten distraernos y que, en algunos casos, se han convertido en nuestro hobbys. Aprovecha para relajarte haciendo lo que realmente te gusta.
Compaginar las responsabilidades laborales y familiares, y sobre todo hacerse cargo de las tareas domésticas, puede resultar agotador y ser una fuente constante de ansiedad durante el embarazo, por eso hay que saber poner límites y reducir la carga de trabajo. Podemos pedir ayuda a la pareja, familiares y amigos, y valorar la opción de contratar a una persona para que nos ayude con las tareas domésticas.
Contar con una buena red de apoyo (pareja, familiares, amigos…) es sin duda la mejor manera de plantar cara a la ansiedad y a los cambios emocionales durante el embarazo.
Sí, es cierto, durante el embarazo la mujer se convierte en una fuente constante de emociones, las cuales lejos de esconder hay que expresar para canalizar y gestionarlas mejor. No tengas miedo a compartir cómo te sientes con tu pareja, tus familiares y amigos más cercanos. Las clases de preparación al parto, por ejemplo, son una buena manera de conocer a otras mujeres con las que compartir los sentimientos y ayudar a reducir la tensión y ansiedad.
También te puede interesar: ¿Se pueden tomar antidepresivos en el embarazo? y toma de los 10 problemas comunes del embarazo que no deben asustarte
En primavera la piel necesita un extra de cuidados para que sufra lo menos posible…
Este miércoles, la audiencia al completo de 'La Isla de las Tentaciones' se ha quedado…
Gabriela Guillén ha vuelto a la carga contra la figura del padre de su hijo…
Frank de la Jungla ha compartido un vídeo en el que relata cómo han sido…
Sandra Barneda y Nagore Robles vuelven a verse las caras más de un año después,…
Pese a que en las últimas semanas habían aumentado los rumores de una reconciliación entre…