Coger al niño en brazos: beneficios. En cuanto nacen los bebés una de las sensaciones más bonitas es tenernos en brazos, la calidez de sus manos, la sensación de cercanía es una sensación muy bonita que a todas las mamás y papás nos gusta sentir. En ocasiones hemos pensado que no es muy bueno tenerlos en brazos durante mucho tiempo, sin embargo, pese a lo que pensábamos es muy positivo no solamente tenerlos en brazos sino el contacto en general con los progenitores. Desde hace unos meses se ha puesto más de moda la utilización de los fulares para llevar a los niños, y esto es debido a que la cercanía con la madre supone numerosos factores positivos para el bebé. ¿Quieres conocerlos?
De todo el mundo es bien sabido que tener en brazos a los bebés es algo muy bueno para ellos. Desde el momento en que nacen nos recomiendan tenerlos encima de nuestro pecho para que sientan nuestro latido y se sientan más tranquilos, más calmados y sobre todo que se sientan seguros.
Está demostrado que los niños que tienen más contacto físico con sus familiares, con sus padres principalmente, son más felices, tienen menos problemas de salud y engordan más. Por ello es muy recomendable, pese a lo que muchos piensan, tenerlos en brazos y tener mucho contacto físico con ellos, por esto, desde hace unos meses hasta ahora se han puesto muy de moda los fulares portabebés. Estos fulares hacen que tanto los bebés como las madres, o padres, que les portan estén cómodos y en contacto permanente con los niños.
Y es que el contacto con los niños siempre es beneficioso, en este caso hablamos de cogerlos en brazos pero realmente cualquier actividad que realicemos con ellos les aportará confianza y bienestar así como una gran seguridad. Entre las actividades que podemos realizar con los bebés se encuentra por ejemplo la natación, que pese a no ser el deporte que conocemos generalmente ayuda a que el bebé pierda el miedo al agua, sienta sensación de libertad y de autocontrol y mejore su calidad de vida tanto a nivel físico como mental.
En este caso nos centraremos en los beneficios de llevar al niño en brazos.
Razones por las que llevar al niño en brazos
- Engordan más, lloran menos y son más felices que los que van sentados siempre en su sillita. El motivo es que al estar en contacto con los padres sienten su calor, su ternura y su cariño, lo que hace que sean más felices. Como consecuencia de su felicidad, engordan más y están más sanos.
- Ayuda a tener una relación más cercana con los padres, a la larga tendrán más confianza en sus progenitores y tendrán una sensación mayor de cercanía y bienestar cuando estén a su lado.
- Se duermen antes en brazos que en la silla. La sensación que proporcionan los brazos de una madre o un padre suponen seguridad, con lo que nos bebés no temen quedarse dormidos si se sienten seguros con sus padres.
- Evita la plagiocefalia. Este problema, que consiste en que la parte posterior del cráneo se aplasta, puede ser provocado por pasar demasiado tiempo tumbado boca arriba. Al tenerlo en brazos sus movimientos van variando.
- Exteriorizan más sus sentimientos y socializan más y mejor que los niños que están en silla. La razón es que cuando un niño va en brazos ve la vida como la ven sus padres, es decir, tienen una mayor visión de la ciudad y las personas que le rodean que si están cerrados en la sillita y solo pueden mirar hacia arriba.
- Se evitan los cólicos de gases. Es uno de los problemas que más pequeños tienen, debido a una mala ingesta derivada del biberón en el que ha podido tragar más aire de lo normal y otras muchas causas.
- Ayuda a calmar el sistema nervioso del bebé.
En definitiva, pese a que siempre hemos escuchado la frase “no hay que coger al bebé en brazos que se malcría” no debemos hacerlo mucho caso ya que no hay evidencias científicas que indiquen que así sea. Además, y como habéis leído hace unas líneas, coger al bebé en brazos el máximo tiempo posible tiene muchísimos beneficios.