La modelo de 36 años y el veterano cantante han sido padres. Bertín Osborne, que no asistió al parto, ha solicitado la prueba de paternidad.
El pasado 31 de diciembre Gabriela Guillén dio a luz a un bebé del que no ha trascendido el sexo, pero que en cualquier caso es el primer hijo de la modelo y el séptimo de Bertín Osborne. El cantante, que no asistió al parto, ha solicitado la prueba de paternidad.
Gabriela Guillén y Bertín Osborne han sido padres en la distancia. La modelo y el cantante de 69 años llevan varios meses alejados el uno del otro y envueltos en polémicas. El veterano presentador ha dejado claro que no ejercerá como un padre, pero «si se confirma» que es hijo suyo «colaborará» con su crianza, según él mismo ha reconocido. Y es que el actor español ha solicitado una prueba de paternidad «por responsabilidad». «Tengo mucha familia. Tengo hijos, nietos… Sería una irresponsabilidad no hacérmelas», ha deslizado tras conocerse que Gabriela Guillén ya había dado a luz.
Además, el Bertín Osborne también ha querido tener buenas palabras hacia la madre, tras el frio distanciamiento que venía mostrando en apariciones previas. «Gabriela es una chavala estupenda, buenísima gente. Ella es muy atractiva, muy trabajadora y muy decente. Yo no puedo hablar más que bien de ella», ha dicho antes de revelar que «ha rechazado» cualquier ayuda que él le ha ofrecido durante el embarazo. Hecho por el que le parece «muy injusto» que la acusen de «tener un interés».
Gabriela Guillén ya está en su casa con el bebé
Por su parte, Gabriela Guillén ya estaría en su casa tras haber dado a luz. Aunque de momento la modelo ha rechazado hacer ninguna declaración tras el parto, hay voces que especulan con la posibilidad de que la modelo vaya a dar una exclusiva donde va a contar todos los detalles de su embarazo.
Respecto a las pruebas de paternidad que ha solicitado Bertín Osborne, la modelo ya aseguró que está dispuesta a ello, ya que, según sus propias palabras, no tiene nada que ocultar. Aunque eso sí, quiere que las pruebas se hagan en un lugar concreto: el Instituto toxicológico. La elección del mismo responde a la necesidad de evitar cualquier tipo de duda sobre la veracidad y fiabilidad de las pruebas.