La influencer es una enamorada del norte y sus últimas publicaciones solo podían decir una cosa en cuanto a una nueva propiedad para hacer vida familiar.
María Pombo es una de las influencers mejor pagadas de nuestro país. La joven madrileña disfruta el verano en compañía de sus hijos y su marido, Pablo Castellano. Alejados ya de los rumores de ruptura de los que sus seguidores se hacían eco la semana pasada, la enamorada pareja se encuentra ya de vacaciones.
Pablo y María, acompañados de los padres y las hermanas de la joven, han hecho las maletas y disfrutan ya de las agradables y frescas temperaturas de Cantabria, comunidad que desde años le robó el corazón, y que todo parece que visitará más a menudo.
Nueva casa
Aunque María no se ha pronunciado sobre esta cuestión, quizás solo ha querido naturalizar una situación pasada sin darle más importancia. La madrileña ha anunciado que ella y su marido han cumplido su sueño de construir en Cantabria una casa para la familia que según ella misma ha afirmado estará lista para Navidades. La reforma de la casa corre a cargo de su marido quien posee una importante empresa de construcción y quien ha construido también su casa actual. La vivienda es muy espacio y se encuentra a pocos metros del mar. La pareja de influecers tendrá como vecinos a los padres de María y a sus hermanas pues el resto de la familia también está construyendo una casa al lado.
Se trata de una propiedad de nueva construcción pues tal y cómo María comentaba, hace años que pasaba por esa zona y siempre venia el terreno y soñaba con levantar una casa para ella y todos los suyos en ese precioso lugar. La obra comenzó el pasado agosto, pero no ha sido hasta ahora que ha revelado el secreto.
Recuerdos familiares
Como bien afirmó Pombo, ella siempre tuvo ese sueño pues Cantabria ha sido su lugar de recreo vacacional desde que era una niña- Allí ha pasado todos los veranos de su infancia en compañía de sus hermanas, primos y tíos. No quería dejar a que sus hijos perdieran la oportunidad de vivir una infancia en la naturaleza y próxima a las playas cántabras tal y como ella disfrutó en sus años de niñez.
Desde que la joven adquirió notoriedad allá por 2015 hemos podido verla disfrutar de las playas junto a su familia. Si bien es cierto que hace unos años ya no disfruta de la casa familiar a la que acudía con la familia de su padre, distanciados por un enfrentamiento económico hace años, la joven alquila desde hace varios veranos un caserío cántabro para disfrutar. Este será el último año ya que el verano del 2024 ya tendrá su bonita casa amueblada y lista para disfrutar.